Anunciado desde hace meses y esperado como un ‘mini SLS AMG’, por fin conocemos a fondo a la nueva creación del fabricante alemán, el Mercedes-AMG GT que, además de estrenar denominación y división dentro de la marca, ha perdido las alas de gaviota por el camino.
La nomenclatura es un detalle, pero conviene pararse en ello. Hasta ahora AMG era una coletilla que se ponía a las versiones top de los modelos germanos, pero a partir de ahora pasará a ser una nueva submarca, la división deportiva de Mercedes.
Volviendo al modelo en sí, no se pueden obviar ciertos tintes que recuerdan al SLS AMG, pero tiene suficientes elementos diferenciadores que lo distancian de este. La silueta es similar, pero el lenguaje de diseño deja un lado los perfiles marcados y afilados para centrarse en formas más redondeadas y suaves, parecidas a las que hemos visto en los últimos lanzamientos de la marca.
Además, es más corto que su hermano mayor con una longitud de 4.556 mm, le equipara en achura (1.939 mm) y es 37 mm más alto (1.289 mm). Mercedes-AMG ha puesto especial énfasis en la ligereza, por lo que ha hecho un uso intensivo del aluminio en su estructura y su carrocería. El resultado es un peso total, repartido 47/53 entre ambos ejes, de 1.540 kg, 1.570 en la versión S.
Y es que el modelo llegará en dos variantes. La básica, denominada Mercedes-AMG GT a secas, monta un motor V8 sobrealimentado por dos turbos que entrega 480 CV de potencia y 600 Nm de par máximo; la superior, llamada Mercedes-AMG GT S, cuenta con el mismo propulsor pero potenciado hasta los 510 CV y los 650 Nm de par. En ambos casos se combina con una caja de cambios automática DCT de siete velocidades con la que consiguen acelerar de 0 a 100 km/h en 4,0 y 3,8 segundos, respectivamente, y alcanzar una velocidad máxima de 304 y 311 km/h en cada caso.
Además de la mayor potencia, el GT S también tiene de serie interesantes añadidos: diferencial autoblocante trasero, suspensión AMG RIDE CONTROL con tres modos de funcionamiento, llantas de 19 pulgadas delante y de 20 detrás con neumáticos 265/35 y 395/30, y un sistema de frenos con discos de 390 mm de diámetro (el modelo normal los calza de 360 mm).
Para los que les sepa a poco, de manera opcional se puede instalar un kit de frenado con discos carbocerámicos de 402 mm en el eje anterior y de 360 mm en el posterior, así como el AMG DYNAMIC PLUS, un pack que endurece o relaja la respuesta del motor, la caja de cambios, etc en función del tipo de conducción que se lleve a cabo.
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