Audi ha iniciado la comercialización en España de la segunda generación del Q3. Se trata de un todocamino de 4,48 metros de longitud renovado por completo, desde un diseño mucho más atractivo a un habitáculo muy capaz gracias al incremento de sus dimensiones generales, pasando por motores más eficientes y una dotación tecnológica propia de automóviles de segmentos superiores. La oferta del nuevo Q3 arranca en un precio recomendado de 35.920 euros, en una gama con la que Audi espera mejorar los resultados de un modelo del que ya circulan 44.800 unidades por las carreteras españolas (1,1 millones en todo el mundo).
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Este SUV, fabricado por Audi en su planta húngara de Györ, evidencia desde el primer golpe de vista su evolución general. Tiene aspecto de ser mucho más coche en todos los sentidos, hasta el extremo de que no faltarán clientes potenciales de su hermano mayor Q5 que lleguen a considerar al nuevo Q3 como una alternativa realmente válida. Sobre sus cualidades ya hablamos con detalle tras una primera toma de contacto en la presentación internacional del modelo, evidenciándose que puede llegar a erigirse como una de las referencias de un segmento premium en el que debe competir con rivales tan cualificados como el BMW X1, el Mercedes-Benz GLA o el Volvo XC40.
La que ahora ha quedado definida es la gama del nuevo Q3 que Audi propone para el mercado español, con un total de 28 versiones repartidas en número idéntico entre cuatro niveles de equipamiento: básico, Advance, S Line y Black Line. La propuesta mecánica es igualmente generosa, con tres motores de gasolina entre 150 y 230 CV, además de dos turbodiésel con potencias que van desde los 150 a los 190 CV. Bloques que se combinan, dependiendo de los casos, con sistemas de transmisión a las ruedas delanteras o el integral Quattro y cambios manual de seis velocidades o automático S Tronic de siete.
El cuidado y amplio interior del nuevo Audi Q3. / Audi
La horquilla de precios se mueve entre los 35.920 euros de la variante básica de gasolina 150 CV, con tracción delantera y cambio manual y la más cara TFSI de 230 CV, con tracción Quattro y cambio S Tronic que llega a los 55.360 euros. A esta tarifa hay que aplicar los incrementos correspondientes a los accesorios que elija cada cliente entre la larguísima lista de opcionales de Audi, entre los que destacan dos instrumentaciones digitales complementarias a la de serie (MMI Navegación Plus y Audi Connect Pus).
Una variedad de posibilidades que también se encuentra presente en los sistemas de seguridad, que si bien son muy completos ya de origen en cualquiera de las versiones, se pueden mejorar con soluciones del estilo del asistente de la conducción adaptativa, la ayuda al aparcamiento o las cámaras con visión de 360 grados.
Para su lanzamiento, Audi ofrece una serie especial denominada Edition One que se basa en el equipamiento S Line pero con detalles más deportivos, incluyendo una suspensión específica y las llantas de 20 pulgadas, además de los faros matrix LED y dos colores exclusivos, un llamativo naranja y un gris algo más discreto junto con la parrilla delantera y el logo posterior del modelo en negro. El interior se caracteriza por asientos deportivos con costuras de contraste, volante en piel o algunos remates en tejido Alcántara.
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Una vida sobre ruedas. De piloto (malo) de motocross a periodista deportivo en Diario AS, incluyendo una década en los grandes premios de MotoGP. Apasionado de los coches y las motos, en más de 30 años ha tenido el privilegio de probar unos cuantos cientos de unos y de otras. Ahora, subdirector en Prisa Motor.