Poco a poco, las marcas van ampliando sus gamas eléctricas. En el caso de Cadillac, tras su debut con el Lyriq, su primer modelo de cero emisiones, llega el turno del Cadillac Celestiq. Se trata de una gran berlina de corte cupé por la que todavía habrá que esperar un poco: su producción comenzará en diciembre de 2023 y llegará al mercado el año siguiente.
A pesar de todo ese tiempo, el desarrollo se centrará en aspectos técnicos, puesto que la imagen será idéntica a la del modelo que se acaba de anunciar.
Cadillac ha trasladado su lenguaje de diseño eléctrico a un formato completamente distinto al del SUV previo, creando una berlina de considerables dimensiones. Sin embargo, a pesar de ello, transmite una imagen muy atlética.
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Esto se debe principalmente a su silueta, que parte de una enorme parrilla carenada situada en una posición bastante baja y prosigue con un largo capó. Suma a esto unas enormes llantas de 23 pulgadas que aportan músculo, y cuenta con una enorme distancia entre ejes. El perfil se remata con la suave caída del techo, que se prolonga hasta dar lugar a una gran luna trasera.
Un interior propio del lujo de Cadillac
Detalles que destacan son el acabado bitono de la carrocería, los numerosos listones y marcos cromados que la recorren y, sobre todo, los pilotos traseros, de un tamaño notable y situados en una posición muy poco ortodoxa.
El interior deja claro que se trata de un modelo con un claro enfoque en el lujo, en el que tiene una presencia notable la tecnología. Todo el salpicadero está cruzado por una pantalla de 55 pulgadas, a la que se suma una consola central táctil de 11, otra de control para las plazas traseras que mide 8 y dos adicionales, en los respaldos, con 12,6 pulgadas cada una y que permiten que los pasajeros disfruten del sistema multimedia.
En principio, solo estará disponible con un único sistema de propulsión eléctrico que emplea dos motores (uno en cada eje) que desarrollan 600 CV y 867 Nm de par máximo, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos.
El sistema está alimentado por una batería de 111 kWh de capacidad, gracias a la que homologa una autonomía de 483 kilómetros. Es compatible con carga rápida en corriente continua de hasta 200 kW, con la que en solo 10 minutos pueden sumar 126 kilómetros de alcance adicional.
Más centrado en el confort que en las prestaciones puras, el chasis dispone de suspensión neumática adaptativa, así como de eje trasero direccional que permite girar las ruedas 3,5 grados para mejorar su estabilidad y maniobrabilidad.
Cadillac ha adelantado que el precio del Celestiq empezará por encima de los 300.000 dólares (unos 312.000 euros al cambio actual), pero no ha concretado más.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.