La heladería más pequeña del mundo es un coche

Es la original respuesta que ha dado es marca a la llegada de las zonas de emisiones ultrabajas de Reino Unido.

Fiat 500e

El Fiat 500e Gelateria es una edición especial inspirada en las heladerías de los años 50.

El Fiat 500 es uno de esos coches que colecciona ediciones especiales y la última es, sin duda, la más dulce de todas. Los de Turín han cogido como punto de partida la versión eléctrica de su urbanita, el Fiat 500e, y la han convertido en un pequeño camión de helados.

Tanto es así que Fiat lo ha definido como “la heladería más pequeña del mundo”. A pesar de su tamaño, es capaz de atender a unas 300 personas al día que podrán pedir un cono o una tarrina del sabor que ha creado la marca para la ocasión. El nuevo helado está inspirado en el bicerin, una bebida caliente tradicional de Turín. Sabe a café y chocolate.

Fiat 500e ‘Gelateria Edition’

El Fiat 500e ‘Gelateria Edition’ está basado en la versión descapotable del Fiat 500e al que han añadido todo el equipamiento necesario para convertirse en una heladería sobre ruedas. Esta versión es una respuesta a las recientes restricciones aplicadas en Reino Unido, donde acaban de empezar a implantar las zonas de emisiones ultrabajas.

Allí los camiones de helados con motor diésel tienen vetado el acceso. La medida ya está activa en algunos distritos de Londres (Camden, Greenwich y Westminster City) y, en 2024, llegará a otras 14 ciudades de Reino Unido.

Imitando las heladerías italianas

El Fiat 500e ‘Gelateria Edition’ luce una carrocería bitono en azul claro y crema. Una combinación con la que la marca ha querido evocar el estilo de las heladerías italianas de los años 50, algo que también han replicado en el interior. El conductor, por cierto, cuenta con una campanilla personaliza para atraer la atención de los más golosos.

El habitáculo del 500e ‘Gelateria Edition’ está hecho a medida. Fiat ha eliminado todos los asientos menos el del conductor y en la parte trasera ha instalado un expositor de helados protegido por una cubierta retro.

El mismo motor del Fiat 500e

Las tarrinas que contienen los helados se almacenan en un par de congeladores situados detrás del asiento del conductor. Tiene una capacidad total de 30 litros y funcionan con baterías. Hay, también, un espacio exclusivo para los conos, tarrinas y cucharas y todavía es posible guardar unas tumbonas para que los clientes tengan un sitio donde sentarse.

El Fiat 500e convertido en un pequeño camión de helados tiene la misma configuración mecánica que el coche eléctrico sobre el que se asienta. Por lo tanto, está impulsado por un motor de 117 CV que extrae la energía suficiente para funcionar de una batería de 42 kWh, cuya autonomía no llegará a los 260 kilómetros oficiales debido al peso de los congeladores y su demanda extra de potencia.

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Elena Sanz Bartolomé

Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.

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