¿Cómo orientar las salidas del aire acondicionado para que enfríe mejor?

Antes de saber cómo se deben orientar las salidas del aire acondicionado, se deben efectuar también una serie de operaciones que darán como resultado una mayor eficiencia en el enfriamiento del vehículo.

Para empezar, cuando se llegue al vehículo hay que bajar todas las ventanillas para permitir que el aire caliente acumulado salga al exterior y al aire acondicionado le cueste menos enfriar todo. Por eso también es conveniente circular unos dos o tres minutos con ellas abiertas y así airear todo el habitáculo. Por mucho calor que haga fuera, más se habrá condensado dentro del coche.

Otro truco muy eficaz consiste en cerrar todas las puertas, bajar la ventanilla del copiloto y a continuación abrir y cerrar lo más rápido posible y unas cinco o seis veces la puerta del conductor.

Tras esto, se enciende el aire acondicionado y se circulan unos metros hasta que el aire frío comience a salir y a inundar el habitáculo: al principio no sale a la temperatura que se le solicita y por eso, este primer aire caliente también es mejor que se escape por las ventanillas. La temperatura ideal, y además recomendada por la DGT, se sitúa entre 21 y 23 grados. Mejor si es 23, ya que consumirá menos energía.

Pero, en cualquier caso, es muy importante poner el aire y no circular a más de 30 grados en el habitáculo ya que no es solo una cuestión de comodidad, sino también de seguridad: la DGT recuerda que conducir con una temperatura elevada aumenta el riesgo de sufrir un accidente en un 20%.

Más aún. A una temperatura de 35 grados, el conductor reacciona un 20% más lento que otro que circula a 25 grados, lo que produce un efecto similar a conducir bajo una tasa de alcoholemia de 0,5 gramos por litros en sangre.

Posición de las salidas de aireación

Hay que tener en cuenta que el aire frío es más denso que el caliente y por lo tanto tiende a descender. Por eso, la orientación ideal de las rejillas de salida del aire acondicionado es hacia arriba. Así se distribuye mejor el aire por todo el habitáculo e incluso llegará mucho mejor a los pasajeros de las plazas traseras en caso de no disponer en esta zona de salidas de aireación.

Es de lo más habitual orientar la salida del aire frío hacia el conductor o el copiloto para que el aire les llegue directamente a la cara y al torso y se refresquen antes, pero este choque térmico puede ocasionar enfermedades respiratorias o incluso del sistema nervioso, como alguna parálisis facial. Es decir: poner esta dirección en los aireadores es muy peligrosa.

Si el coche cuenta con salidas de aireación traseras también es bueno dirigirlas hacia arriba por la misma razón que las delanteras.