Alemania es el gran mercado europeo del automóvil. Por su población y su gran industria del sector, se trata de un país con un atractivo parque móvil para el resto de los países europeos. Son muchos los compradores que se deciden a buscar en ese caladero el modelo usado de sus sueños, generalmente de marcas de alta gama como Audi, BMW, Mercedes o Porsche.
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La importación se puede realizar de forma particular, pero también son muchas las empresas dedicadas a esta actividad desde España. Se especializan en la compra de automóviles procedentes de Alemania, o algunos otros países, y los ofrecen a sus clientes con las consiguientes ventajas en los trámites. ¿Es esta opción interesante para los compradores? No existe una respuesta absoluta a tal cuestión, sino una serie de aspectos a tener en cuenta.
Ventajas de los profesionales
Las empresas especializadas en estas importaciones ofrecen servicios valiosos a sus clientes. Como en cualquier otra actividad, la primera decisión básica es elegir profesionales de prestigio, experiencia y solvencia; si el comprador cae en las redes de oportunistas e incluso timadores la experiencia pasa a convertirse en una pesadilla.
Confiando en esas cualidades de las empresas del sector, sus ventajas para el interesado son muchas y considerables:
- Búsqueda del vehículo que se ajuste a las necesidades o exigencias del cliente o disponibilidad directa de este.
- Control del estado mecánico a través de sus inspecciones técnicas y revisiones específicas de cada unidad.
- Gestión de todos los trámites de importación.
- Transporte desde el origen hasta el punto de destino.
- Inspección Técnica del Vehículo (ITV) para la obtención de la ficha técnica española.
- Trámites en la DGT para su matriculación.
- Pago de los impuestos y tasas correspondientes.
- En algunos casos, posibilidad de financiación de la compra.
- También se ofrece la entrega de otro automóvil como parte del pago.
- Garantía del vehículo, bien a través de la propia marca en los casos que siga vigente o de empresas dedicadas a este servicio.
Y también, inconvenientes
Sin embargo, existen compradores que optan por realizar la importación de forma particular y personalmente. Y es que recurrir a una empresa puede acarrear también algunos inconvenientes que se deben tener en cuenta y valorar:
- Precio más elevado del vehículo. Obviamente, todo el trabajo realizado por las empresas especializadas tiene un coste que repercutirá en el coche. Su labor de intermediarios se remunera y, por tanto, encarece el producto.
- Encontrar una empresa de confianza y solvente no siempre es sencillo. Durante un tiempo se trató de una actividad en la que se produjeron fraudes y los compradores deben tener muy claro a quién recurrir. Por supuesto que la mayoría del sector ofrece honestidad y garantías, pero si el interesado sufre a una del pequeño porcentaje de defraudadores puede enfrentarse a un problema mayúsculo.
- Si el comprador actúa directamente el proceso será más largo y laborioso, pero siempre tendrá acceso a información de primera mano del vehículo, podrá elegir el que mejor cumpla con sus expectativas y no conformarse con las propuestas de los importadores.
Por tanto, cada caso debe ser analizado de forma individual, considerando las posibilidades del comprador, su urgencia, sus conocimientos técnicos, su presupuesto… Una vez valorados cada uno de estos aspectos, será el momento de optar por la importación a través de empresas especializadas o a la gestión particular.
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