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En los últimos meses, la Comisión Europea ha comenzado a estudiar posibles restricciones a la conducción para personas mayores de 65 años, con el objetivo de reforzar la seguridad vial en un continente cada vez más envejecido. Aunque aún no se ha planteado una prohibición general, sí se barajan medidas como revisiones médicas más estrictas, limitaciones horarias o incluso restricciones geográficas para ciertos perfiles de conductores.
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La DGT y los mayores de 65 años: ¿cuál es la edad máxima para conducir en España? Estas propuestas, que se enmarcan dentro de una estrategia más amplia de movilidad segura y sostenible, han generado un intenso debate entre expertos, asociaciones de mayores y autoridades nacionales. La clave está en encontrar el equilibrio entre garantizar la seguridad en carretera y preservar la autonomía de millones de ciudadanos que siguen al volante en edades avanzadas.
Limitar la conducción profesional
Por ejemplo, en Italia, los conductores mayores de 68 años no pueden renovar sus permisos para conducir camiones, autobuses o vehículos con remolque. Aunque esta medida no es nueva, ha vuelto a generar debate tras la difusión de noticias confusas en medios internacionales.
En realidad, esta limitación ya estaba plenamente operativa desde 1992, aunque ha sido modificada y actualizada en varias ocasiones, siendo objeto de debate, especialmente en momentos de escasez de conductores profesionales. De hecho, en 2024 se propuso incluso elevar la edad máxima a 70 años para paliar la falta de chóferes que no solo afecta a Italia, sino a toda Europa.
Transporte de pasajeros y vehículos pesados
La normativa afecta a las licencias de tipo C y D, necesarias para manejar vehículos pesados o dedicados al transporte de pasajeros. A partir de los 65 años, los conductores deben someterse a controles médicos más estrictos. Pero al cumplir los 68, la renovación de estos permisos queda prácticamente vetada, salvo en casos muy excepcionales y con autorización médica específica.
Esta restricción no se aplica a los permisos de tipo B, por lo que los mayores de 68 años pueden seguir conduciendo turismos sin problema. Tampoco se trata de una prohibición generalizada, sino de una medida enfocada en la seguridad vial y en la exigencia física que implica el transporte profesional.
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