La mayoría de las multas en la carretera las reciben los conductores, por exceder los límites de velocidad, no llevar el cinturón de seguridad o estar mirando el móvil mientras se conduce. Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), en 2022 se formularon 5.542.005 denuncias.
Sin embargo, los ocupantes del vehículo también pueden cometer infracciones y también se les puede multar. ¿Cuáles son las sanciones posibles? Y, en esos casos, ¿son los pasajeros siempre los responsables?
Cinturón, casco y retención infantil
Un supuesto típico es el del uso de los cinturones de seguridad. Si el pasajero de un vehículo que lleva los instalados no los utilizara, la responsabilidad recae sobre esa misma persona.
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“La multa que le corresponderá es de 200 euros, pero, al contrario que al conductor, no conllevará retirada de cuatro puntos, aunque el pasajero tuviera permiso de conducir”, explica Jordi Marí, abogado de la compañía de seguros de defensa jurídica, ARAG.
No es así en el caso del uso de los sistemas de retención infantil. Legalmente, en los vehículos de hasta nueve plazas incluido el conductor, todos los menores de edad cuya estatura sea igual o inferior a 135 centímetros deberán utilizar sistemas homologados y adaptados a su talla y peso.
Además, deberán viajar en los asientos traseros del vehículo, salvo en tres circunstancias reflejados por la normativa. La responsabilidad de cumplir con estas normas es del conductor del vehículo. No hacerlo supondrá una sanción de 200 euros y, además, la retirada de cuatro puntos del permiso de conducción.
El casco en la moto
Y siguiendo con los elementos de seguridad, ¿qué ocurre con el uso del casco? ¿A quién corresponde la multa si el pasajero no lo lleva? Aunque parezca curioso, no ocurre lo mismo que con el cinturón de seguridad en los coches.
“En este caso, el conductor es el responsable de la no utilización del casco por parte del pasajero o que no lo utilice correctamente”, aclara Marí. Aquí también le correspondería una sanción de 200 euros y sin puntos para el conductor del vehículo.
Todo lo dicho anteriormente no afecta a los conductores profesionales que transportan personas. Por ejemplo, a un taxista no se le considerará responsable del incumplimiento de las normas por parte de los ocupantes.
Mala postura y distracción al volante
Otra multa que corresponde al conductor es el circular con menores de 12 años como pasajeros de motocicleta o ciclomotor en condiciones distintas a las reglamentarias. Estas son llevar casco de protección, ir a horcajadas y con los pies apoyados en los reposapiés laterales y utilizar el asiento correspondiente detrás del conductor. La sanción por incumplir alguna de estas normas es de 200 euros.
“Otra infracción poco conocida a la que también se le atribuye la responsabilidad al conductor del vehículo es que los pasajeros mantengan una posición adecuada en el vehículo”, indica el abogado de ARAG. Por ejemplo, quien se tumba en el asiento trasero, saca los brazos o las piernas por la ventanilla o coloca los pies en el salpicadero. En caso de incumplimiento, la multa será para el conductor, con un importe máximo de 100 euros de sanción.
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