El comportamiento al volante afecta a la seguridad vial. Depende de las reacciones, del estado físico y mental y de la atención y el cuidado que se presten durante la conducción, las probabilidades de acabar causando un accidente de tráfico aumentan o disminuyen.
No está bien generalizar, pero a veces hay motivos para afirmar qué conductores son más o menos peligrosos cuando conducen según el tipo de coche que llevan.
Un estudio desarrollado por Lending Tree, una entidad crediticia y financiera estadounidense, ha descubierto cuáles son los peores conductores y los que más accidentes provocan y todos comparten el mismo coche. Los datos se han obtenido a través de la información de las pólizas y los partes al seguro de los conductores en Estados Unidos.
Los conductores con más accidentes
Los propietarios de un Tesla son aquellos que más ratio de accidentes por cada 1.000 conductores acumulan: 23,54, en comparación con el 22,76 y el 20,90 de las siguientes marcas. Estos datos se han obtenido tras observar los siniestros de tráfico desde el pasado noviembre de 2022 hasta el mismo mes actual.
Sin embargo, son los conductores que llevan coches de la marca norteamericana RAM, conocida por sus grandes y potentes pick-ups, los peores conductores de esta clasificación. Les siguen los de Tesla, los de Subaru, Volkswagen y Mazda. Cerrando las últimas posiciones, seguirían los conductores de BMW, Lexus, Infinity, Hyundai y, finalmente, Toyota.
En esta clasificación de peores conductores no solo se ha tenido en cuenta la siniestralidad. También han entrado en el cómputo de este estudio factores como las denuncias por conducir bajo los efectos del alcohol y las multas por exceso de velocidad, entre otras infracciones de tráfico.
Así, los conductores que llevan un BMW son los que más denuncias por conducir bajo los efectos del alcohol acumulan. La ratio es de 3,13 denuncias por cada 1.000 conductores, mientras que los siguientes son, de nuevo, los conductores de RAM, con un índice de 1,72.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.