‘Renting’ de coches, la alternativa a la compra tradicional que ofrecen los bancos: ¿tiene más ventajas que inconvenientes?

El renting de coches ha dejado de ser una opción exclusiva para empresas. Cada vez más particulares optan por esta fórmula de movilidad que permite disfrutar de un vehículo nuevo sin preocuparse por gastos imprevistos, trámites o depreciación. Frente a la compra tradicional, el renting ofrece una experiencia más flexible, cómoda y predecible.

Además, desde hace un tiempo, los cuatro grandes bancos españoles ofrecen muy buenas condiciones para contratar el renting de coches, con cuotas competitivas, servicios integrales y sin complicaciones ni sorpresas. Para aquellos usuarios que buscan comodidad, previsibilidad y flexibilidad, el renting se consolida como la mejor alternativa a la compra tradicional.

¿Qué es el ‘renting’ y por qué está ganando terreno?

El renting es un contrato de alquiler a medio o largo plazo que incluye todos los servicios asociados al uso del vehículo: mantenimiento, seguro, impuestos, asistencia en carretera y, en muchos casos, cambio de neumáticos. El usuario paga una cuota mensual fija y, al finalizar el contrato, devuelve el coche a su legítimo dueño, en este caso, el banco.

Esta modalidad evita, en la mayoría de los casos, desembolsos iniciales, elimina preocupaciones por averías y facilita el acceso a modelos más modernos y eficientes. Además, permite adaptar el vehículo a las necesidades cambiantes del usuario sin compromisos a largo plazo.

¿Por qué contratar el ‘renting’ con un banco?

Las entidades bancarias han entrado con fuerza en el mercado del renting para particulares. Frente a los concesionarios o empresas especializadas, los bancos ofrecen ventajas adicionales: mayor solvencia, condiciones financieras competitivas, integración con otros productos bancarios y una experiencia digital más fluida.
Además, al tratarse de instituciones con gran capacidad de negociación, pueden ofrecer precios más ajustados y una gama de vehículos más amplia. La confianza que genera contratar con un banco también es un factor clave para muchos usuarios.

Renting Banco Santander

El Banco Santander ofrece su servicio de renting a través de “Santander Renting”. El proceso es 100% digital y permite elegir entre una amplia gama de vehículos, con contratos que van desde los 36 hasta los 60 meses. La cuota incluye todos los servicios, y no es necesario efectuar ningún pago inicial.

Ejemplo destacado
Opel Corsa 1.2T. Por 308,55 euros al mes, IVA incluido. En 48 cuotas y máximo 15.000 km/año. Seguro a todo riesgo sin franquicia.

Renting BBVA

Por su parte, “BBVA Autorenting” permite contratar por internet y ofrece una experiencia muy intuitiva. El usuario puede configurar su coche, elegir duración y kilometraje, y finalizar la operación directamente desde la web. Las cuotas incluyen todos los servicios, y no hay entrada.

Ejemplo destacado
Peugeot 208 Allure Puretech 100. Por 259,00 euros al mes, IVA incluido. En 48 cuotas y máximo 10.000 km/año. Seguro a terceros.

Renting CaixaBank

CaixaBank ofrece su renting a través de “Renting&Go”, con una propuesta muy enfocada en la sostenibilidad y la movilidad eficiente. El proceso es digital, y la entidad destaca por ofrecer condiciones flexibles y una atención personalizada.

Ejemplo destacado
Renault Austral Techno. Por 425,00 euros al mes, IVA incluido. En 48 cuotas y máximo 10.000 km/año. Seguro a todo riesgo sin franquicia.

Renting Banco Sabadell

El Banco Sabadell también se suma al renting para particulares con una oferta competitiva y transparente. El proceso se puede iniciar en línea, y la entidad ofrece asesoramiento personalizado para adaptar el contrato a cada perfil.

Ejemplo destacado
Seat León 1.5 eTSI. Por 431,00 euros al mes, IVA incluido. En 36 cuotas y máximo 15.000 km/año. Seguro a todo riesgo con franquicia de 150 euros.