Los escúteres siguen siendo el segmento más popular entre las motocicletas, puesto que engloban modelos de acceso para aquellos que se inician en el mundo de las dos ruedas, son automáticos y más prácticos que otros tipos de motos. Por eso las marcas intentan presentar alternativas en las distintas cilindradas para atraer a un público mayor, algo que en Honda representa la Forza, que está disponible en versiones de 125, 350 y 750cc.
El Forza 750, que está disponible desde diciembre por 11.350 euros, es un escúter completamente nuevo. Tiene un tamaño considerable, lo que proporciona espacio para las piernas y protege contra el viento a ambos pasajeros.
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Además, monta un motor bicilíndrico en paralelo de 750cc cargado de tecnología: acelerador electrónico, control de par seleccionable Honda (HSTC), transmisión de doble embrague (DCT) y múltiples modos de conducción.
Es, asimismo, un modelo bastante práctico, ya que dispone de un hueco de almacenaje de 22 litros –que permite guardar un casco integral–, tiene un cargador USB, la Honda Smart Key y el sistema de conectividad con el teléfono Honda Smartphone Voice Control System (HSVCS).
Su hermano pequeño es el Forza 350 (disponible este mes por 5.950 euros), que ha aumentado 50cc su cilindrada y utiliza el nuevo motor eSP+, de mayor rendimiento y respuesta más rápida, así como una mayor eficiencia que le permite homologar un consumo de 3,3 l/100 km. Esto, sumado a su depósito de 11,5 litros, le otorga una autonomía de 340 kilómetros. Otra mejora se aprecia en el parabrisas, que se puede regular otros 40 milímetros adicionales. Más adelante incorporará el sistema HSVCS para el móvil.
Por última, el Forza 125 (disponible este mes por 5.175 euros) mejora su aerodinámica, equipa de serie el HSTC (Honda Selectable Torque Control) y, como ocurre con el modelo 350, equipa el sistema Honda Smart Key y tiene hueco bajo el asiento para para dos cascos integrales, con toma de carga USB incluida.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.