Más de 4.000 kilómetros con el Renault Austral: estos son los motivos por los que nos ha gustado tanto

Más de un mes y por encima de 4.000 kilómetros de conducción. Resulta poco frecuente tener la oportunidad de realizar una prueba de un vehículo tan a fondo, pero en esta ocasión Renault ha propiciado que EL MOTOR conozca a fondo la última actualización del Austral, su SUV de tamaño compacto (4,53 metros de longitud).

El nuevo Austral, que se fabrica en la planta de Renault en Palencia, mantiene la esencia del modelo original lanzado en 2022, pero convenientemente puesta al día para refrescar su atractivo diseño. Se trata de un coche de aspecto moderno e incluso imponente, con cambios significativos en el capó, los paragolpes, la parrilla y los grupos ópticos de ledes.

Es un SUV que gusta, que exhibe una personalidad marcada y anticipa desde el primero golpe de vista todo lo que ofrece en términos de tecnología, conectividad y eficiencia. El acceso al habitáculo es fácil gracias a la altura a la que se encuentran los asientos, además de contar con apertura y cierre automáticos por proximidad con su llave inteligente de estilo de tarjeta.

También el portón dispone de mando remoto, lo que resulta de gran utilidad cuando se debe cargar su generoso maletero con tres capacidades al contar con una banqueta trasera deslizable y abatible: 527, 657 y 1.736 litros.

Un interior muy cuidado

El ambiente en el habitáculo del nuevo Renault Austral emana calidad y tecnología. El nivel de acabado Techno es el intermedio de la gama (por encima del Evolution y por debajo del Esprit Alpine) y se muestra muy completo en todos los sentidos, desde elementos de confort a los de seguridad, pasando por el sistema de conectividad o los asistentes a la conducción.

La habitabilidad es más que correcta y los asientos se revelan muy confortables, teniendo regulación eléctrica el del conductor. La banqueta trasera se puede mover hasta 16 centímetros, además de reclinarse en tres ángulos, lo que facilita encontrar la posición más cómoda para sus ocupantes. La altura libre al techo desde la baqueta asientos los 90 centímetros, con lo que incluso los pasajeros de mayor estatura no deberían tener problema para viajar con comodidad.

La instrumentación, como ya es casi norma en la industria, es digital y configurable, aunque la gran protagonista del salpicadero es la pantalla central en posición vertical y de 12,3 pulgadas en las versiones superiores. Además de ofrecer la inevitable conectividad con Apple Car Play y Android Auto, el sistema OpenR Link permite acceder a todas las funcionalidades de Google a través de la cuenta del usuario.

Una interesante utilidad ya que traslada al automóvil servicios tan prácticos como Google Maps, el asistente del gigante tecnológico, sus juegos e incluso toda la información deportiva a través de la aplicación del Diario AS.

Otra aportación muy destacable en esta actualización del Austral es la incorporación de un sistema de reconocimiento facial. Una cámara ubicada en el interior del pilar A (el delantero del lado izquierdo) permite identificar al conductor y relacionarlo con su perfil personal, adaptando con ello de forma automática parámetros como la posición de conducción, sus emisoras de radio favoritas, su cuenta de Google o el menú de inicio de su preferencia.

Tecnología híbrida

La motorización superior de la gama Austral es la Full Hybrid E-Tech de 200 CV. Una solución que busca ofrecer rendimiento y eficiencia mediante la combinación de una mecánica de gasolina de tres cilindros, 1,2 litros y 130 CV junto a dos unidades eléctricas. La primera de ella entrega 50 kW (70 CV) y se alimenta de una batería de un par de kWh para contribuir al movimiento del vehículo; la segunda tiene una potencia de18 kW (25 CV) y sirve para el arranque del motor de combustión y los cambios de marcha.

Este último automático multimarcha ofrece hasta 15 combinaciones y la potencia conjunta se transmiten a las ruedas delanteras. La dirección es eléctrica y dispone de asistencia variable, mientras que otra característica reseñable del nuevo Austral es su sistema 4Control de cuatro ruedas directrices: a más de 50 km/h, las ruedas traseras giran hasta un grado en el mismo sentido que las delanteras para mejorar la estabilidad en curva, mientras que por debajo de esa velocidad lo hacen en la dirección opuesta hasta cinco grados para potenciar la maniobrabilidad.

Por supuesto no falta un completísimo paquete de 32 asistentes a la conducción, que proporcionan una mayor seguridad en las más variadas circunstancias y facilitan la tarea a quien se pone al volante. Un detalle muy positivo es que el usuario puede personalizar las que desea tener disponibles en cada momento, pudiendo desactivarlas fácil y rápidamente mediante dos pulsaciones en un botón ubicado a la izquierda del volante.

En marcha

El Renault Austral Full Hibrid E-Tech 200 se revela como un SUV de enfoque familiar realmente solvente. Cumple con la mayoría de las exigencias que pueda plantear el conductor de un coche de este estilo, con un tamaño adecuado para la ciudad, aunque sin renunciar a la habitabilidad y aplomo necesarios para afrontar largos viajes por carretera.

Su potencia permite rodar a muy buen ritmo en autovía y autopistas, además de facilitar los adelantamientos en vías de doble sentido o superar pendientes sin rechistar, incluso a plena carga. El tacto del freno es el propio de los coches con sistema de regeneración de energía, algo esponjoso, y precisa de cierta adaptación para calcular las distancias de parada. Una capacidad de recuperación eléctrica que se puede regular mediante las levas situadas en el volante, permitiendo incluso la conducción con un solo pedal, ya que el coche llega a detenerse cuando la retención se regula al máximo.

Las cuatro ruedas directrices también requieren habituarse a las reacciones del vehículo, el giro del tren trasero transmite unas sensaciones que pueden sorprender al principio. Sin embargo, una vez superada esa extrañeza inicial, el sistema convence y ayuda tanto a baja como a alta velocidad, aportando seguridad y soltura.

La hibridación, lógicamente, hace notar sus ventajas especialmente en el entorno urbano, donde Renault asegura (con cierto optimismo) que el Austral puede llegar a circular el 80% de los recorridos en modo eléctrico. Sin llegar a ese extremo, si que es cierto que la electrificación aporta toda su eficiencia en los entornos en los que la batería se recarga con mayor facilidad y frecuencia. La marca se refiera a un consumo medio combinado de 4,7 litros cada 100 kilómetros, pero en el uso real apunta más a situarse sobre los 6,5 litros, que llegan a ser más de siete circulando a ritmo alegre por carretera.

Con un precio de 38.612 euros para la versión Techno de 200 CV, el nuevo Renault Austral se posiciona como una opción muy interesante dentro de su segmento. El etiquetado Eco resulta ventajoso para las personas que deban acceder a zonas de bajas emisiones de grandes ciudades, mientras que la polivalencia general del conjunto se convierte en su principal virtud, ofreciendo todo lo necesario para satisfacer las exigencias y necesidades de conductores muy variados, con una tarifa que, sin ser baja, sí resulta competitiva.