Parece una Game Boy, pero cuesta 30.000 euros: el aparato ilegal del que ningún coche está a salvo

Los coches sin llaves son muy cómodos, pero esta funcionalidad abre una nueva puerta de acceso a los ladrones de vehículos. Al final, sea por ondas o con métodos tradicionales, si los amantes de lo ajeno quieren llevarse un coche, se lo llevan. 

El desarrollo de las tecnologías les ayuda a ello. Y es que con cada nueva medida de seguridad que surge, al final, se acaba inventando un replicador de ondas u objetos similares para conseguir hacerse con el control del vehículo.

Desde hace un tiempo se está pudiendo observar cómo algunos ladrones utilizan un dispositivo similar a una Game Boy para robar los coches. En realidad, de Game Boy tiene solo tiene la carcasa, ya que en su interior alberga toda la tecnología y conexiones necesarias para replicar las ondas de una llave de un coche. 

Esta especie de Game Boy lo que hace es replicar la llave del coche, por lo que es muy fácil robarlo. Al copiar las ondas, permite acceder al interior del vehículo e incluso arrancarlo. Los ladrones solo tienen que conducir hasta huir del lugar del crimen.

No obstante, este dispositivo no es barato. Los medios estadounidenses estiman que su coste en internet es de entre los 14.700 y los 27.000 euros, por lo que el uso de esta Game Boy para robar coches no es un sistema tan difundido.

Una Game Boy para cada coche

De todas formas, ya en Estados Unidos se están detectando algunos casos que afectan, sobre todo, a coches de un cierto precio como el Hyundai Ioniq 5, el Kia EV6 o Genesis GV60. Sin embargo, se ha confirmado que hay muy pocas marcas que se libren de la amenaza que supone esta Game Boy, ya que se han encontrado modelos capaces de replicar las ondas de casi todos los fabricantes: Infiniti, Lexus, Mercedes-Benz, Mitsubishi, Nissan, Subaru, Toyota… E incluso Tesla.

Es cierto que, como esta Game Boy, hay varios dispositivos similares en el mercado negro. Entre sus ventajas frente a otros dispositivos está su camuflaje y su amplio radio de acción. Eso sí, su precio no hace que sea accesible para cualquier ladrón, así que por el momento el nivel de amenaza todavía es leve.