Que Georgina Rodríguez sea tendencia en estos días no resulta algo extraño. Y es que la influencer y pareja del futbolista Cristiano Ronaldo ha estrenado este 24 de marzo la segunda temporada de su reality en Netflix: ‘Soy Georgina’.
De nuevo, varios momentos de la empresaria han dado de qué hablar tanto en la serie como en las entrevistas que está concediendo, y uno de ellos tiene que ver con un uno de sus nuevos coches.
Uno más para su garaje
Pese al impresionante garaje con modelos de Ferrari, Rolls-Royce, Lamborghini y Bugatti que poseen tanto Cristiano como ella, Georgina ha adquirido uno nuevo para su colección.
Se trata del Smart #1, un SUV 100% eléctrico con diseño futurista que tiene nada menos que 272 CV de potencia. También cuenta con una versión Brabus, cuya potencia llega a 428 CV. Sus precios van de los 42.100 euros hasta los 49.600 euros. El modelo se ha puesto a la venta este año.
Sin embargo, una de las cosas que más destaca Georgina de su nuevo utilitario es que se pueden poner las luces del interior en color rosa, el color estrella de la empresaria y su documental.
El reto de conducir un automático
Lo curioso de Georgina con este coche es que como se puede ver en uno de los capítulos, ella no lo estrena, sino que deja que sea una de sus amigas quien lo haga.
Tal y como aclara la influencer, su amiga Mamen nunca ha conducido un coche automático, por lo que el trayecto resulta cómico y algo terrorífico para Georgina.
En apenas cinco minutos de capítulo, Georgina casi olvida que el coche estaba cargando y su amiga forma una gran cola de coches en la carretera. Según la hermana de Georgina, “conduce a trompicones”.