Cuando un conductor supera el límite de velocidad y los agentes le dan el alto, no hay excusas que justifiquen la infracción cometida. A pesar de ello, son muchos los que dan rienda suelta a su imaginación para intentarlo.
El resultado son las invenciones más surrealistas y, en algunos casos, inútiles. Este es el guion de la historia protagonizada por un joven conductor italiano que no logró convencer a la policía con su antológica excusa.
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Un exceso de 97 km/h
El fin de semana pasado, en la madrugada del sábado al domingo, la Gendarmerie nationale de Francia tuvo que emplearse a fondo para perseguir a un conductor de 20 años, que viajaba de Rennes a París.
Circulaba por la A11, cerca de Ver-lès-Chartres (una población situada en el departamento de Eure-et-Loir) y fue detectado por un radar móvil: iba 97 km/h por encima del límite permitido en ese tramo, que está limitado a 130 km/h.
El coche, un BMW Serie 1, alcanzó los 239 km/h: tras aplicar el margen de error, la velocidad registrada fue de 227 km/h. Se trata del mayor exceso de velocidad registrado en esta zona a lo largo de 2025.
Una excusa sorprende e inútil
Tal y como ha informado France 3 Centre-Val de Loire, el conductor italiano no conocía el Código de Circulación francés… o eso aseguró. Su excusa fue tan sorprendente como endeble: aseguró a los agentes que no sabía que había límites de velocidad en Francia y que creía que era como en Alemania, donde algunos tramos donde se puede circular con total libertad.
Una justificación que, obviamente, no convenció a la policía. Le impusieron una multa de 750 euros y su vehículo, que era propiedad de su primo, fue inmovilizado: tuvo que irse en taxi. Además, le han quitado el carnet y le prohibirán conducir en Francia por un período aún por determinar.
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Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.
