En 2022, Valtteri Bottas cambió Mercedes por Alfa Romeo. No obstante, en esa mudanza de Alemania a Italia no se ha perdido un hiperdeportivo que, a buen seguro, será la joya del garaje del finlandés: el Mercedes-AMG One, que, al parecer, habría recibido antes que Hamilton.
El piloto de Fórmula 1 ha mostrado en sus redes sociales su nuevo hiperdeportivo. Ha viajado hasta Affalterbach (Alemania), donde está la sede de AMG, para recogerlo. En las fotos se aprecia el acabado elegido para su Mercedes-AMG One: un tono azul combinado con una buena dosis de fibra de carbono, que está presente en parte del capó, los faldones laterales, las entradas de aire, la zaga…
Valtteri Bottas no es el único piloto de F1 que tendrá un Mercedes-AMG One en su colección. Tanto David Coulthard como Nico Rosberg y Lewis Hamilton también están esperando el suyo: de momento ninguno ha confesado si ya está en su poder, pero sí se sabe que el británico pidió la primera unidad.
Mercedes no pudo cumplir la solicitud de su piloto porque, según parece, el primer Mercedes-AMG One fue para un cliente anónimo de Alemania. Las entregas empezaron en enero de 2023 para las 275 personas que han pagado, aproximadamente, 2,5 millones de euros por unidad.
Para llegar a convertirse en el vehículo de producción más rápido de Nürburgring y Monza, el Mercedes-AMG One ha tenido que recorrer un largo camino que comenzó en 2017 cuando, en el Salón del Automóvil de Frankfurt, fue presentado como prototipo. Su producción arrancó cinco años después: en 2022.
Los obstáculos que encontraron en su desarrollo retrasaron el lanzamiento. No sólo tenían que cumplir con todas las regulaciones de emisiones, también tuvieron que encontrar la manera de que el motor se mantuviera al ralentí en 1.200 rpm y no en 5.000 como un F1. En este ajuste invirtieron nueve meses.
Un motor de la F1
No en vano, el Mercedes-AMG One está impulsado por una versión modificada del V6 turboalimentado de 1.6 litros, con el que las ‘flechas plateadas’ dominaron los circuitos entre 2014 y 2022. Esta variante cuenta con el apoyo de cuatro motores eléctricos (con su correspondiente batería de 8,4 kWh) y va asociada a una transmisión manual automatizada de siete velocidades, que manda esa fuerza a ambos ejes.
La potencia combinada del conjunto se va hasta los 10.63 CV y tiene su línea roja en las 11.000 rpm. Con estas prestaciones, es capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, a 200 km/h en siete segundos y a 300 km/h en 15,6 segundos. Su velocidad máxima es de 352 km/h.
Por cierto, el seis cilindros del Mercedes-AMG One tiene que reconstruirse cada vez que el hiperdeportivo supere los 50.000 kilómetros. Una cifra utópica para un vehículo de estas características, pero es algo que Bottas y compañía deberán tener en cuenta.
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