¿Por qué nunca hay que echar gasolina cuando hay un camión cisterna cerca?

Cientos de personas pasan cada día por alguna gasolinera para llenar el depósito y seguir con su trayecto. Un movimiento convertido en rutina que todos los conductores deberían cuidar: sobre todo si hay un camión cisterna.

Hay quien afirma que nunca se debe repostar cuando uno de estos vehículos está en la gasolinera haciendo su trabajo, es decir, rellenando los tanques de combustible. Otros apuntan a que esta recomendación se debe tener en cuenta, pero sin caer en extremismos.

No hay que echar gasolina o diésel cuando el camión cisterna haya llenado los tanques de la gasolinera: este es el consejo que han recibido muchos conductores. Hay una razón detrás de él. Al echar el combustible, los restos del anterior que reposan en el fondo se remueven.

Si se llena el tanque del coche inmediatamente, esos sedimentos pueden acabar en su interior. No obstante, las estaciones de servicio suelen colocar un cartel informando de que el depósito está cerrado temporalmente debido a esta maniobra: por ello, los sedimentos regresan al fondo antes de volver a estar operativo.

Revisiones y limpiezas

Por otro lado, es habitual que tanto los tanques como los surtidores estén equipados con su propio sistema de filtración para impedir que los restos de combustible lleguen a los depósitos de los vehículos que pasan por la estación de servicio.

A esto hay que añadir las revisiones y limpiezas periódicas que las gasolineras deben hacer en los tanques. Para ello, extraen el combustible y lo almacenan en un depósito provisional. A continuación, se lleva a cabo un proceso de desgasificación, se limpia el interior y se raspan los estratos. Finalmente, se vuelve a llenar.

El filtro del combustible: la última barrera

Si nada de esto funciona y las impurezas llegan al tanque del coche, no hay que olvidar que el filtro del combustible también tiene un papel relevante: actuará como barrera frente a estos restos.

Razón por la que un correcto mantenimiento de este componente es vital; además, se puede complementar con una limpieza del depósito. No es una operación obligatoria, pero sí aconsejable para eliminar la acumulación de impurezas y otros elementos que pueden alterar la calidad del combustible.