La Fórmula 1 no será el único espectáculo de este fin de semana en Abu Dabi: también llegan los taxis sin conductor 

Es el primer despliegue de taxis sin conductor de Uber fuera de Estados Unidos. En otras palabras: se trata de su debut internacional y el lugar elegido ha sido Abu Dabi, la capital de los Emiratos Árabes Unidos.

Para el lanzamiento, Uber ha unido fuerzas con WeRide: la empresa china de vehículos autónomos. El lanzamiento supone el primer servicio de taxi sin conductor fuera de Estados Unidos y su cuarto mercado.

WeRide se alió con Uber en septiembre de 2024 y comenzó a ofrecer viajes autónomos con un conductor de seguridad a bordo en Abu Dabi en diciembre de 2024. Ahora han pasado al siguiente nivel.

Yas Island y el GP de F1

Los taxis sin conductor tienen el nivel cuatro de conducción autónoma, lo que significa que el vehículo puede operar sin intervención humana en condiciones específicas. Así las cosas, no contarán con un conductor de seguridad a bordo.

Por ahora, los primeros trayectos se llevarán a cabo en el distrito de Yas Island. Son dos razones las que les han llevado hasta aquí: es una zona popular entre los turistas y es donde, este fin de semana, se celebra el Gran Premio de Abu Dabi en el que se decidirá quién se lleva el Mundial de Fórmula 1.

También llegarán a Europa

WeRide ha puesto en marcha varios servicios de taxis sin conductor en Pekín y Cantón. Eso sí, ahora las empresas chinas de tecnología de conducción autónoma buscan reforzar su presencia en Europa mientras afrontan restricciones en el mercado estadounidense.

Uber y WeRide también han estrenado viajes en robotaxi con un operador de seguridad a bordo en Riad, Arabia Saudí, el pasado mes octubre. Según lo que anunciaron en mayo, en los próximos cinco años, planean extender el servicio a 15 ciudades más: entre ellas, algunas serán europeas.

El Viejo Continente mira, cada vez más, a los taxis sin conductor de nivel cuatro. No en vano, Bolt, la plataforma estonia de transporte bajo demanda, anunció que se asociará con la empresa china de conducción autónoma ‘Pony.ai’ para llevar vehículos autónomos a Europa.