BMW Serie 3: la berlina superventas crece en todos los sentidos

El BMW Serie 3 posiblemente sea uno de los primeros nombres que vienen a la mente del público al pensar en una berlina del segmento premium. Es un modelo con mucha historia y que lleva años cosechando buenas ventas, y en el Salón del París 2018 se ha presentado su séptima generación: una apuesta firme para mantener su legado.

El nuevo BMW Serie 3 resulta perfectamente reconocible, pero el fabricante alemán evoluciona el diseño en la dirección correcta, con una parrilla de doble riñón de mayor tamaño y en una posición ligeramente superior, una musculatura muy definida, paragolpes más marcados, faros LED que opcionalmente pueden ser láser, llantas de hasta 19 pulgadas y una zaga que de serie ya monta dos salidas de escape.

La berlina alemana sigue la tendencia del mercado en la que los coches son cada vez más grandes pero no más pesados: aumenta tanto en longitud (4.709 mm) como en anchura (1.827 mm) y altura (+1 mm), y además ve crecer su distancia entre ejes hasta los 2.851 mm, lo que garantiza un mayor espacio en el interior. Sin embargo, en la báscula marca 55 kilos menos.

En este BMW Serie 3 los pasajeros irán más cómodos que en su predecesor y contarán con 480 litros de capacidad en el maletero, pero lo que de verdad destaca es su tecnología. El cuadro de instrumentos es 100% digital, los controles analógicos están agrupados bajo la pantalla de la consola central, estrena freno de mano eléctrico y está disponible una llave digital que permite desbloquear el coche desde el móvil.

Su gama mecánica contará con seis versiones: BMW 318d con motor 2.0 de 150, 320d con bloque 2.0 de 190 CV, 330d con un 3.0 de 265 CV, 320i con motor 2.0 de 184 CV, 330i con un 2.0 de 255 CV y el M340i de 374 CV como tope de gama. Solo las variantes más bajas estarán disponibles con cambio manual.

Más tarde llegará una variante híbrida enchufable, con 292 CV de potencia, 60 kilómetros de autonomía eléctrica y un consumo homologado de 1,7 l/100 km.