¿Cuál fue el primer coche de la historia con cambio automático?

Las cajas de cambio automáticas están hoy a la orden del día, puesto que, aunque originalmente eran exclusivas de modelos de segmentos superior y marcas premium, con el paso del tiempo se han ido abaratando y es posible encontrar incluso utilitarios con este tipo de transmisión. Sin embargo, cuando la industria del automóvil estaba en sus inicios, todos eran manuales, ¿cuál fue el primer coche con caja de cambios automática de la historia?

Ese honor le correspondió al Oldsmobile de 1940, aunque la historia de este tipo de caja de cambios se remonta incluso más atrás. La primera transmisión automática se inventó en 1921 y fue obra del ingeniero canadiense Alfred Horner Munro. El problema es que ésta estaba diseñada para operar con aire comprimido, lo que hacía que no tuviera suficiente fuerza, motivo por el que nunca llegó a comercializarse.

Sin embargo, el concepto fue recogido por General Motors, que incorporó a la fórmula el uso de fluido hidráulico, creando la primera transmisión automática en la década de 1930. Todavía habría que esperar un poco más, hasta 1940, hasta que presentara el producto definitivo, la transmisión “Hydra-Matic”.

Ese mismo año la compañía empezó a ofrecerlo como opción alternativa a la caja de cambios manual de tres marchas montaban los Oldsmobile de serie.

La caja Hydra-Matic tenía cuatro marchas y cuatro posiciones: punto muerto, marcha adelante (Drive), baja (Low) y marcha atrás. En baja (Low), la transmisión utilizaba únicamente las dos primeras marchas, lo que estaba pensado para desplazamientos en zonas urbanas. Por otra parte, marcha adelante (Drive) solo usaba la primera, la tercera y la cuarta.

El sistema puede parecer complejo visto desde el prisma actual, pero para la fecha fue una revolución, ya que quitaba al conductor la compleja tarea de cambiar de marchas de manera manual, que era un sistema menos intuitivo que las transmisiones manuales actuales.