El Ford Fiesta crece en deportividad con la versión ST Edition

El Ford Fiesta ST es de los pocos utilitarios radicales que hay en el mercado (junto con el Hyundai i20 N y el Toyota Yaris GR), pero Ford acaba de lanzar una nueva variante que ahonda todavía más en su deportividad.

Las mejoras que incluye la versión Edition son dos. La primera es un sistema de suspensión ajustable que se ha desarrollado en el exigente trazado de Nürburgring. Rebaja la altura en 15 milímetros en el eje delantero y en 10 en el trasero, y cuenta con 16 ajustes de recuperación y 12 de rebote. El resultado es un comportamiento dinámico todavía más pulido que el del ST convencional.

El segundo son sus llantas, de 18 pulgadas y con un diseño específico de 10 radios, que son más resistentes que las que suele montar el modelo y que, además, son dos kilos más ligeras cada una, lo que reduce el peso del conjunto.

A esto hay que sumar que, por otra parte, el resto de su apartado mecánico se mantiene intacto: motor 1.5 EcoBoost de 200 CV y 290 Nm de par, frenos con discos delanteros ventilados de 278 milímetros y traseros sólidos de 253 milímetros, diferencial de deslizamiento limitado Quaife como opción, una aceleración de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y una velocidad punta de 230 km/h.

El Ford Fiesta ST Edition solo está disponible con la carrocería de tres puertas pintada en Azul Azura, con numerosos elementos de contraste en color negro, tanto en mate (como la parrilla inferior) como brillante (carcasas de los retrovisores, difusor, techo, parrilla superior, etc.).

En el interior continúa el ambiente deportivo gracias al efecto de fibra de carbono del cuadro de instrumentos y de las salidas de aire. También contribuyen a ello los asientos Recaro con función de calefacción, así como el cuero del volante, el freno de mano y palanca de cambios.