En Europa nos quejamos de que el Honda Civic europeo solo se vende en formato compacto y en América se apenan porque la carrocería hatchback es exclusiva del viejo continente. Nunca llueve a gusto de todos. Pero los hechos son los hechos: la décima generación del Civic compacto será una exclusiva europea.
Aunque la marca de la ‘H’ la haya mostrado en formato prototipo en el Salón del Automóvil de Ginebra, ha dejado más que claro que pocos cambios habrá en la versión definitiva. Por eso, ya tenemos sus primeros detalles.
Estéticamente supone un paso hacia delante y, aunque es obvio que su diseño general se “relajará” algo en el modelo de producción, es más deportivo que en la presente generación. La parrilla y los grupos ópticos son similares a los de sus hermanos mayores, pero el paragolpes está formado casi al completo por enormes entradas de aire.
En la vista lateral es donde se aprecia el cambio fundamental respecto a su predecesor, tanto por dimensiones como por concepto. El nuevo Civic será 130 mm más largo, 30 mm más ancho y 20 mm más bajo, dando lugar a una silueta más atlética y que, aún siendo un compacto, da la impresión de acabar con un zaga tipo tres volúmenes.
En esta se aprecia la característica configuración formada por los pilotos y el alerón, así como un difusor de lo más agresivo que aloja una salida de escape doble central. Cabe descartarlo casi al 100% para el modelo de serie, pero ¿y en el futuro Type-R? Es adelantarse a los acontecimientos, pero es una posibilidad.
Un ejemplo de lo a punto que lo tiene Honda es que ya ha detallado hasta su gama de motores, que de lanzamiento estará formada por 1.0 VTEC, 1.5 VTEC y 1.6 i-DTEC, aunque no ha especificado sus prestaciones.
Habrá que esperar hasta 2017 para verlo en la calle.
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