El mercado del automóvil es exigente y cambiante como pocos. Productos en constante actualización exigen a los fabricantes un esfuerzo en la vigencia de sus propuestas. Y la competencia feroz pone a prueba la aceptación de cada modelo, por lo que mantenerse en el foco de los clientes se antoja una tarea ardua.
Una realidad que sirve para contextualizar el éxito de un modelo como el Seat Arona. El SUV del segmento B fue durante 2024, y por sexto año consecutivo, el más vendido en España entre los de su categoría. Su tipología es una de las preferidas de los compradores, por lo que prácticamente todas las marcas generalistas cuentan con alternativas en su catálogo.
Más información
Pero de todas ellas ha sido el Arona el que ha vuelto a conquistar al mayor número de clientes ya que, por 120 euros al mes, se puede acceder a un modelo con una excelente relación calidad precio, un comportamiento ágil y seguro, una gran habitabilidad, su eficiente gama de motores, y una avanzada tecnología, con multitud de elementos orientados a la seguridad, la conectividad y el confort, incluso como equipamiento de serie.
Seat matriculó 20.269 unidades del Arona durante el pasado ejercicio, lo que le sirvió para ser el SUV urbano preferido por los españoles y, además, para auparse a la sexta posición general del mercado. Solo el también popular Ibiza le superó dentro de la marca española, con sus 22.021 matriculaciones. El Ibiza es el tercer modelo de mayor venta absoluta en el mercado.
Se trata, por tanto, de dos modelos fundamentales en el éxito de Seat, la tercera marca más vendida del mercado español durante 2024 con un total de 65.299 unidades, un 11,5% más que el año anterior y que se traducen en una cuota del 6,4%.
Un éxito al que también ha contribuido el Seat León, actualizado en 2024 que, con 12.715 unidades vendidas, prácticamente ha duplicado sus ventas con respecto al año anterior, gracias a la renovada versión híbrida enchufable con etiqueta Cero emisiones, y con hasta 133 kilómetros de autonomía que aporta su nueva batería de mayor capacidad, entre otros importantes cambios.

Muchos argumentos
El Seat Arona se lanzó en 2017 y su actual generación se actualizó en 2021. Pese a esta permanencia en el mercado, mantiene una serie de cualidades que sirven para conquistar a los compradores y liderar así su segmento un año más. Se revela como un coche polivalente y equilibrado, ideal para satisfacer muchas necesidades y con las garantías que ofrece una marca tan reconocida como la de Martorell.
Lo más evidente es que su diseño conserva toda la frescura y atractivo que exhibe desde su llegada al mercado, sin olvidar las numerosas opciones de personalización que Seat ofrece a sus clientes para crear un coche adaptado a sus preferencias. Con una longitud de 4,13 metros y la altura elevada propia de un SUV, su interior se muestra capaz y funcional para un uso medio, incluyendo un maletero de 400 litros.
La tecnología es otro de sus principales argumentos, tanto en elementos de seguridad como de confort. El Arona ofrece conducción autónoma de Nivel 2, además de los asistentes que contempla la legislación europea y otros añadidos. En cuanto a la conectividad, su pantalla central de hasta 9,2 pulgadas se combina con un cuadro de instrumentación también digital que llega a las 10,2 pulgadas.
El Arona se vende con tres niveles de acabado (Style, X-Perience y FR), además de las variantes Special Edition que se caracterizan por un equipamiento aún más completo a un precio ajustado.

Con estas características es capaz de atraer a diferentes tipos de usuarios. Desde jóvenes que valoran su dinamismo y calidad a buen precio hasta personas de mayor edad que buscan un automóvil práctico y fiable. Cumple a la perfección con funciones de un segundo coche familiar, pero también tiene argumentos más que suficientes para ser un vehículo único, por tamaño, habitabilidad, prestaciones y eficiencia.
Sus motores, siempre de gasolina, están diseñados para aquilatar los consumos (y, en consecuencia, sus emisiones) al máximo, con variantes de 95, 115 y 150 CV, que además se combinan, según las versiones, con cajas de cambio manuales o las sofisticadas automáticas DSG de doble embrague.
La guinda a un producto tan solvente la pone el valor añadido que solo puede aportar una marca como Seat. Es el caso de una garantía de hasta 10 años o la financiación Seat Flex, que se adapta a las necesidades circunstanciales de los clientes. Mediante una cuota mensual, el comprador puede decidir, al término del contrato, si desea conservar el coche (abonando la cantidad remanente) devolverlo o sustituirlo por otro de la marca. Una flexibilidad que, en el caso del Arona, está disponible desde solo 120 euros mensuales durante cuatro años.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram