Los atascos no son el escenario ideal para el conductor y mucho menos para el coche. Hay que tener presente algunas nociones para actuar en consecuencia: una de ellas son las partes que más sufren en esta situación.
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Con el objetivo de conservar el coche en las mejores condiciones posibles y preservar, así, su vida útil, Juanjo, mecánico de Talleres Ebenezer, ha señalado un error que muchos conductores cometen en un atasco. Es especialmente dañino si el vehículo está equipado con el sistema Start-Stop.
El sistema Start-Stop apaga el motor cuando el vehículo se detiene y lo vuelve a encender cuando se pisa el embrague. En los modelos con transmisión automática esto ocurre cuando se levanta el pie del freno.
El mecánico explica en un vídeo de TikTok: “Eso de arranca, para, arranca, para, arranca, para… tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Lo que tienes que hacer, sí o sí, cuando estés en un atasco es desactivar el Start-Stop. Va a desgastar y cargarse tanto el motor de arranque del coche como la batería”.
Cuidado con el embrague
Señala otro de los componentes que padece, especialmente, estar en un atasco: “El embrague va a sufrir desgaste interno. Se va a calentar a la vez que se desgasta: esa fricción va a hacer que se desgaste. En un diésel menos porque hay más par, pero en un gasolina hay que jugar más”.
¿Cuál es su consejo para minimizar el impacto de este movimiento? “Hay que intentar que el juego del embrague sea lo más corto posible. En vez de estar andando todo el rato dos metros, hay que dejar distancia con el coche de delante e iniciar la marcha. Esto generará menos estrés y menos carga al acelerador y a la caja de cambios”.
Y si el coche es automático, el conductor debe olvidarse de poner el vehículo “en la N y en la D” todo el rato. “Hay que dejar la caja de cambio en la D, en la directa” e, igual que en el caso anterior, dejar espacio para ir avanzando paulatinamente.
La temperatura del coche en un atasco
El mecánico añade que “otra de las cosas que también sufre mucho es la temperatura. Hay que tener mucho cuidado y, sobre todo, ahora en verano. ¿Por qué? Porque el calor afecta muchísimo cuando el coche está al ralentí”.
“Se va a calentar el condensador que está en la zona del radiador y va a meter aire más caliente todavía hacia el motor. Esto hará que pierda capacidad de refrigeración”. Motivo por el que hay que prestar atención al indicador de la temperatura en un atasco.
Y termina: “Cuando está andando y va revolucionado, la bomba de agua mueve esa agua mucho más rápido y el coche funciona mejor, explica”. A esto hay que añadir la labor de los ventiladores y el aire que entra al motor.
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Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.