Por qué uno de cada cinco vehículos es un peligro

Las carreteras españolas no son seguras… también por culpa de los coches (y los camiones, los autobuses y las furgonetas). Las estaciones de Inspección Técnica de Vehículos (ITV) españolas revisaron el año pasado 20.204.766 vehículos y más de cuatro millones (4.102.631) no superaron la inspección a la primera por defectos graves.

Es decir, uno de cada cinco vehículos (el 20,3%) fue rechazado por no reunir las condiciones mínimas de seguridad o por emitir a la atmósfera emisiones contaminantes y nocivas superiores a lo permitido por ley.

Detrás de estas cifras se esconde la crisis económica. Miles de conductores no han podido cambiar de vehículo en los últimos años, de modo que se ha elevado notablemente la edad media del parque automovilístico. En el caso de los turismos, y según datos de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), la antigüedad media a finales de 2017 era de 12,21 años. Hay muchos más coches viejos que antes y además se encuentran, necesariamente, en peor estado. En 2007, la edad media del parque era de 8 años.

El segmento en el que más defectos graves se encontraron fue el de alumbrado y señalización (24,1%), lo que afecta directamente a la seguridad por la importancia de ver y ser vistos. En segundo lugar aparecen los problemas de ejes, ruedas, neumáticos y suspensión (20,8%), elementos fundamentales para garantizar una conducción estable, seguidos de los fallos por emisiones contaminantes (16,4%) y frenos (13,3%).

El envejecimiento del parque no es el único problema preocupante: en torno al 20% de vehículos circulan en España sin tener la ITV vigente, según los datos más recientes. La asociación empresarial AECA-ITV, que agrupa a prácticamente todos los centros de inspección españoles, calcula que esta circunstancia se repite en el 17,7% de los turismos particulares. En vehículos de otro tipo las cifras varían bastante: motocicletas, 58,9%; furgonetas, 52%; remolques, 48,8%; autobuses, 21,2%; y camiones, 7,44%.

Como consecuencia, las carreteras se convierten en un lugar menos seguro. En este sentido, el estudio Contribución de la Inspección Técnica de Vehículos a la Seguridad Vial,realizado por el Instituto de Seguridad Vial de los Vehículos Automóviles Duque de Santomauro, de la Universidad Carlos III de Madrid, en 2012 las estaciones de ITV evitaron 170 víctimas mortales, cerca de 11.000 heridos de distinta consideración y al menos 11.000 accidentes de tráfico.

Este mismo estudio afirma que si el 20% de los vehículos que no acuden a las inspecciones obligatorias lo hicieran (las cifras de absentismo se mantienen estables desde entonces), podrían evitarse al menos otros 7.100 accidentes, cerca de 7.000 heridos y 110 muertes adicionales.