Los conductores se han convertido en víctimas predilectas de los delincuentes. No sólo intentan engañarlos en las gasolineras, con multas falsas de la Dirección General de Tráfico (DGT) o cuando han sufrido un accidente. Ahora también lo hacen poniendo como excusa una supuesta avería.
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Los Mossos d’Esquadra han utilizado sus redes sociales para alertar sobre la estafa de la falsa avería. En el vídeo que han publicado muestran cómo actúan los delincuentes: eligen como escenario el aparcamiento de las áreas de servicio y, después, uno de los estafadores escoge a las víctimas.
Suelen ser personas de avanzada edad o conductores que, normalmente, viajan sin compañía y que acaban de estacionar su coche. A continuación, el segundo delincuente aparca el vehículo junto al de la víctima, mientras el primero le distrae con una supuesta avería en la parte trasera: concretamente en las ruedas.
Aprovechando este paréntesis, el otro estafador roba todos los objetos de valor que la víctima tiene en el coche y que, en ese momento, están desprotegidos. Por último, arranca, se pone en marcha y a cierta distancia, espera a que el otro delincuente le alcance para marcharse del aparcamiento.
¿Cómo evitar el timo del mecánico falso?
Los Mossos d’Esquadra han dado a los conductores algunos consejos para evitar la estafa de la avería falsa. Piden que no se fíen de aquellos desconocidos que se acercan a ofrecer ayuda de forma, aparentemente, desinteresada: sobre todo cuando utilizan una avería como excusa.
Si lo hacen, recomiendan mantener la calma ante los estafadores y llamar a la grúa del seguro o llevar el coche al taller de confianza para que revisen el vehículo con seguridad.
Otros timos en la carretera
Este no es el único timo de este tipo. Hace un tiempo, los Mossos d’Esquadra alertaron sobre uno parecido: el del mecánico falso. Los delincuentes colocan su coche detrás de otro vehículo para hacer una serie de gestos con los que les piden que paren debido a un supuesto desperfecto.
Se presentan como un falso mecánico y le ofrecen su ayuda para reparar la inexistente avería. Incluso realizan una llamada para pedir herramientas y piezas de repuesto. Después de haber solucionado el supuesto problema, el estafador le da una factura donde figura una elevada cifra de dinero que debe pagar en efectivo.
En el caso del timo de la grúa pirata, los estafadores interceptan a conductores que han tenido una avería o han sufrido un incidente. En esta situación, la actuación lógica pasa por llamar a la compañía de seguros para que manden una grúa: en ese tiempo de espera es cuando actúan rápidamente.
Circulan a bordo de vehículos de este tipo, imitando a los de las aseguradoras y a los de las compañías que brindan este servicio. Llegan al lugar del incidente, cargan el coche y piden al conductor dinero en efectivo, afirmando que su compañía se encargará de devolvérselo. Algo que no ocurrirá.
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