No es la primera vez, ni será la última, que vemos un coche fabricado a tamaño real con piezas de LEGO. La compañía ha unido fuerzas en diversas ocasiones con distintas marcas de la automoción como Ferrari, McLaren o Bugatti (crearon un Chiron que se podía conducir), y la última en sumarse a la lista es Honda con esta réplica del Honda Civic Type R.
El compacto deportivo presenta una de las imágenes más agresivas de su segmento y ha sido recreada a la perfección por un equipo de nueve personas, con Ryan McNaught a la cabeza, uno de los pocos LEGO Certified Professional que existen en el mundo.
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Tardaron unas 1.300 horas en montar las más de 320.000 piezas que lo componen, todas ellas pegadas entre sí y sostenidas sobre una estructura de acero. Ha sido realizada con un nivel de detalle máximo, mimetizando todos sus rasgos, aunque algunos de ellos fueron más complicados que otros, como por ejemplo los limpiaparabrisas, por lo finos que son, o el descomunal alerón trasero.
El propio McNaught afirma que ha sido todo un reto ya que “el coche está formado por una cantidad considerable de líneas curvas, lo que ha hecho que sea una construcción compleja a la par que interesante. Desde las luces [que son completamente funcionales] e indicadores hasta los complicados logos de Honda, el detalle en este modelo ha sido algo divertido en lo que trabajar”.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.