“Milán es una ciudad en la que te compras un coche de 70.000 euros y, cuando vas a recogerlo, le faltan las ruedas”. Y es que los amantes de los ajeno tienen objetivos muy precisos en lo que a los robos de vehículos se refieren.
Una de las ciudades más importantes de Italia sufre desde el año pasado graves problemas de seguridad. Los robos de vehículos (o mejor dicho, de sus piezas) son constantes y aquellos propietarios que dejan sus coches aparcados en la calle lo hacen con temor.
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En concreto, las demandas en Milán por haber encontrado el coche sin alguna pieza o componente aumentaron un 30% a principios del 2023 y, a finales del año pasado, la situación no había cambiado ni un ápice.
En un abrir y cerrar de ojos, como explican los afectados, los coches acaban sin ruedas y sin faros. Estas son las piezas más codiciadas por los ladrones de coches en Italia, pero no las únicas. Los catalizadores, volantes y equipos de infoentretenimiento también son sustraídos con rapidez.
Las informaciones publicadas por medios locales italianos han confirmado que la tendencia no ha cambiado en este 2025. A principios de enero se investigaron daños contra los coches aparcados en la calle al aparecer una treintena de ellos vandalizados.
En este caso, los delincuentes ni siquiera habían tratado de robar piezas de los coches aparcados en las calles de Milán. Simplemente se habían dedicado a provocar daños en los vehículos y pinchar neumáticos, como se puede apreciar en los vídeos.
El mercado ilegal de recambios, el objetivo
La razón de este aumento de los robos de piezas de coches en pleno día es el encarecimiento de los repuestos y, por supuesto, el aumento de un mercado de recambios ilegal. Milán fue el año pasado la ciudad italiana con más denuncias por robo de coches. Las redes sociales están plagadas de expertos italianos aconsejando cómo actuar a los residentes de Milán si encuentran daños en su coche al ir a recogerlo.
Las asociaciones de talleres y recambios han denunciado que de cada dos profesionales mecánicos legales hay al menos uno que trabaja con piezas de dudoso origen. La principal ventaja de estos recambios irregulares es su precio, mucho más competitivo. Sin embargo, la consecuencia negativa es la existencia de coches mucho menos seguros en las carreteras, además del daño provocado a las empresas que sí operan siguiendo la legalidad.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.