En esta ciudad y en este país están acostumbrados a la velocidad y a los modelos más exclusivos: una y otros forman parte del paisaje habitual. Tanto es así que existe una autoescuela en la que los futuros conductores se pueden sacar el carnet a bordo de un deportivo de 394 CV, que cuesta más de 150.000 euros.
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En Mónaco, los aspirantes a conductores se han convertido en un público especial para una autoescuela monegasca. Desde finales de marzo, ofrece clases de conducir a bordo de un Porsche: es la primera y, de momento, la única en el principado.
El modelo, en cuestión, es un Porsche 911 Carrera. Un deportivo que, en su versión más barata, la Coupé, arranca en 157.835 euros (precio en España). Está equipado con un motor bóxer de tres litros y seis cilindros, con sobrealimentación biturbbo, que entrega 394 CV y tiene una velocidad máxima de 294 km/h. Pasa de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos.
El motivo
Para que el Porsche 911 Carrera se pudiera transformar en un coche de autoescuela, le han tenido que añadir algunas características como espejos retrovisores adicionales o un conjunto de pedales dobles, entre otros.
¿Cómo se le ocurre a una autoescuela incluir un Porsche 911 Carrera entre los modelos con los que enseñan a conducir? Hay que tener en cuenta que es Mónaco y Paul Croesi, propietario y director del centro, explica a BFM Nice Côte d’Azur que muchos conductores, tras aprobar el examen de conducir, volvían, días después, con vehículos de gran cilindrada.
Se habían sacado el carnet en modelos de 60 u 80 caballos y luego tienen vehículos de 600 o 700 caballos en su garaje: “Somos profesores de conducción, pero también de seguridad vial. Nos pareció importante concienciarles sobre motores grandes y potentes”.
Por este mismo motivo, las clases con el Porsche 911 Carrera también están abiertas a conductores experimentados que deseen aprender a manejar este tipo de coche o a perfeccionar sus reflejos.
Tres veces más caro
Una hora a bordo del Porsche 911 Carrera cuesta tres veces más que una normal. Los alumnos pagan 159 euros frente a los 55 que cuesta una clase en un coche convencional. A pesar de ello, la oferta tiene gran demanda.
Los primeros aprendices confirman ese éxito. Una chica, tras su cuarta clase con el deportivo alemán, comentaba que “conducir un Porsche es muy diferente a hacerlo en un coche normal. Los vemos a menudo, pero estar en uno es algo distinto. Es una experiencia muy agradable”.
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