Este verano se dio a conocer el Lightyear 0, un coche solar que llevaba años en desarrollo y que finalmente se mostró en su versión de producción. Ahora, el peculiar eléctrico ha pasado por las pruebas de homologación WLTP y ha conseguido un hito: se ha convertido en el coche de producción más aerodinámico del mundo.
Ha registrado un coeficiente aerodinámico (Cx) de 0,175, una cifra realmente baja que a efectos prácticos significa, básicamente, que corta el aire.
Más información
Su resistencia a este es mínima, lo que consigue que sea un automóvil realmente eficiente. Y esto resulta clave teniendo en cuenta que se trata de un coche eléctrico, ya que influye de manera muy positiva en ampliar su autonomía.
La autonomía del Lightyear 0
El Lightyear 0 equipa una batería de 60 kWh que le confiere un rango de acción de 625 kilómetros. En alcanzar tanta distancia influyen tanto la propia pila como la ligereza del modelo, así como su cuidada aerodinámica.
Además, este factor le permite sacar un mayor rendimiento a la energía adicional que consigue gracias a su naturaleza solar, que es su principal factor diferenciador. Tiene un total de cinco metros cuadrados de su carrocería recubiertos de paneles que, en un día soleado, son capaces de acumular suficiente electricidad como para circular durante 70 kilómetros.
Según la compañía, esto haría que en zonas con mucho sol, como España, el conductor disfrute de 11.000 kilómetros anuales de autonomía gratuita. Además, en condiciones óptimas, el modelo podría estar durante periodos de hasta siete meses sin necesidad de enchufarse a la red para recargarse de manera tradicional.
Retomando el aspecto concreto de la aerodinámica, alcanzar un Cx de 0,175 sitúa el coche a mucha distancia de cualquier otro modelo de producción. De hecho, la cifra es casi idéntica a la del Mercedes Vision EQXX, un prototipo desarrollado con el único fin de maximizar la eficiencia, y que consiguió un 0,170.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram
Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.