En febrero de 2022, el carguero Felicity Ace se incendió cerca de las Azores. Dos semanas después se hundió en el océano Atlántico, llevándose consigo los restos de 3.965 coches: 281 eran eléctricos, algo que dificultó la lucha contra el fuego. Un episodio que ha cambiado muchas cosas: entre ellas, las entregas de Tesla.
Hay navieras que, desde entonces, han decidido no transportar vehículos eléctricos usados. Las marcas, por su parte, han optado por entregar sus modelos nuevos con la batería por debajo del 50%. ¿La razón? Limita las posibilidades de que se produzca una fuga térmica.
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Cuando este fenómeno se produce dentro de un paquete de baterías, sólo se nota cuando es demasiado tarde. La química de las celdas hace que se genere el oxígeno necesario para avivar el fuego. Esto hace que cualquier incendio en el que esté involucrado un coche eléctrico, sea más difícil de sofocar.
¿Por qué la batería de los Tesla llega al 30%?
Tesla ha decidido aplicar esta fórmula. Son varios los propietarios que, en diferentes foros, han desvelado que, cuando recogieron sus coches nuevos, tenían una carga inferior a la esperada. La marca ha admitido que el nivel de sus baterías puede ser más bajo de lo habitual cuando los clientes reciben el vehículo.
Idealmente, la marca debería cargar la batería antes de la recogida: algo que no está sucediendo. Algunos conductores recibieron su Tesla por debajo del 30%, lo que los obligó a parar en un supercargador para recargarlo.
Una operación que corre a cargo de la propia marca, que ofrece a los conductores cargas gratuitas para agilizar la recogida de sus coches. Los nuevos propietarios de Tesla reciben 150 kilómetros sin coste, que pueden canjear unos días después de la entrega en la aplicación con la que funcionan los supercargadores.
Una medida de la industria
La estrategia de Tesla ha despertado sentimientos encontrados entre sus clientes. Algunos de ellos ven con buenos ojos la recarga gratuita, mientras otros han sugerido a la marca que den a elegir entre esa opción y la de esperar a que la batería se cargue antes de la entrega.
No obstante, parece que no hay mucho que hacer porque es la política que ese está imponiendo en la industria. Sobre todo, teniendo en cuenta que muchos Tesla que llegan a Europa se envían por mar desde China y, probablemente, esta medida responda a lo establecido por las autoridades de este país.
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Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.