Hay automovilistas que no leen bien los carteles de la carretera, pero siguen al volante. Otros muchos conducen sin gafas de repuesto; casi la mitad, un 44%, asegura haberse llevado un susto por culpa de su visión. Gente que no vio o vio tarde algo que influía en su recorrido, según un nuevo informe de la asociación Visión y Vida, con la que colaboran más de 1.500 centros ópticos de toda España.
Con el apoyo de la Dirección General de Tráfico, del Servei Català de Trànsit y de la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco, esta organización ofrece pruebas gratuitas a los conductores para concienciar de la importancia de una buena vista al volante. Porque muchos automovilistas no ven bien, pero conducen, y se ha demostrado la relación entre una mala visión y la siniestralidad.
“Tras seis años de trabajo, ha disminuido el número de personas que conducen con una visión inferior a 0,5 [el mínimo exigido por la ley] de 600.000 a 470.390”, señala como dato positivo Elisenda Ibáñez, coordinadora de la entidad.
El primer estudio de Visión y Vida certificó en 2017 que los conductores con un 0,4 de visión tenían hasta tres veces más accidentes que el resto. Ahora, en 2023, con 1.764 muestras, las personas que creen que no ven bien tienen 10 puntos más de accidentabilidad que aquellos que consideran que ven bien (25,1% frente a 15,6%).
Conductores que no ven
A la vista del informe, queda claro que los conductores no se fían de sus ojos. Solo el 43% considera que ve bien para conducir. Y peor: uno de cada cuatro (27,7%) tiene problemas para leer las señales y los carteles informativos de la carretera. En los peores casos –un 0,6% residual pero peligroso–, de esa tarea se encarga el copiloto.
Uno de cada cinco conductores, reconoce retrasar la visita al optometrista aunque su visión empeore, y solo acude cuando el problema le parece preocupante. “En estos seis años hemos mejorado, pero queda mucho por hacer para lograr una tasa de accidentabilidad cero en carretera debido a un problema visual”, reconoce Salvador Alsina, presidente de esta asociación.
Gafas de repuesto en el coche
Aunque la ley ya no exige llevar gafas o lentillas de repuesto, el 40,7% de los conductores las tiene en su vehículo. El Reglamento General de Conductores obliga a usar correctores de visión (gafas o lentes de contacto) a los automovilistas que las necesiten, pero no indica nada sobre la necesidad de contar con otro par de reserva. “Aunque no lo diga la ley, es muy recomendable”, apunta Alsina.
Otros toman decisiones más arriesgadas, reconoce el máximo responsable de Visión y Vida: “Hay un 28,8% [de automovilistas] que se atreve a conducir cuando se las ha olvidado, algo que nos alarma”.
Entre los conductores, por otra parte, los problemas de la vista se manifiestan en particular con poca luz. Uno de cada tres evita conducir de noche debido a las molestias que siente.
“Durante el amanecer y el anochecer, al 70,9% les molesta mucho la luz solar. Es importante que el conductor sepa que existen algunas lentes especiales que ayudan a mitigar esos problemas y así puedan conducir con mayor seguridad”, recuerda Elisenda Ibáñez.
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Periodista especializado en seguridad vial. Editor y redactor de El Motor desde 2016. Empezó a escribir de fútbol en 1998 en Diario 16 y ha trabajado en varios proyectos de Prisa Media desde 2000. Licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra, es autor de ‘Aquí no se rinde ni Dios’ (2020).