Salir de la autoescuela y obtener el permiso de conducción supone que se sabe circular. Pero dista mucho de saber conducir, sobre todo con confianza y seguridad. Ese es un proceso mucho más largo y exigente, la práctica de un procedimiento con innumerables variables y que en realidad nunca termina de completarse.
Entre otros motivos porque los automóviles también evolucionan, reciben nuevos sistemas y modifican algunos hábitos de su utilización. La formación del conductor debería ser constante y, conscientes de esa necesidad, Volkswagen puso en marcha hace ahora 20 años una escuela de conducción dirigida a propietarios de sus coches, pero también de otras marcas (la mitad de quienes participan pertenecen a este grupo)
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Nacía en 2003 la bautizada como Volkswagen Drive Experience, concebida por especialista en la materia para aportar conocimiento y experiencia a conductores nóveles o los que no lo son pero tienen la ambición de seguir mejorando sus actitudes y aptitudes al volante. En estas dos décadas, y con el último evento celebrado en el circuito del Jarama (Madrid), cerca de 35.000 personas han tomado conciencia de las tecnologías de los vehículos modernos, de sus malos hábitos a los mandos, de su margen de mejora y de la trascendencia de conocer las posibilidades de un coche y cómo aprovecharlas en situaciones comprometidas.
Laura Ros, directora general de Volkswagen España, explica así la filosofía de estos cursos: “Volkswagen Driving Experience es un programa estratégico que refleja nuestro compromiso con la seguridad vial. Creemos que la formación es una de las mejores herramientas para lograr una reducción de la siniestralidad y avanzar en el objetivo cero accidentes”.
Oferta variada
Con el paso de los años, el programa de formación de Volkswagen se ha ido adaptando a las nuevas tecnologías y necesidades de sus clientes, ampliando el catálogo de productos disponibles.
Las posibilidades de aprendizaje van desde cursos personalizados a encuentros personales con Luis Moya (excampeón del mundo de rallys como copiloto de Carlos Sainz y embajador de Volkswagen Driving Experience) hasta eventos en nieve y hielo, pasando por el control de la conducción deportiva con las Escuela R o la escuela GTI, además del descubrimiento de las particularidades de los vehículos eléctricos.
La excelencia de la formación está avalada por la satisfacción de los clientes, que puntúan con un 4,8 sobre 5 la calidad de estos cursos. Ello es posible por un cualificado y numeroso equipo de profesionales que prestan sus servicios como monitores, muchos de ellos con un destacado palmarés deportivo y que ponen todo su conocimiento al servicio de los cursillistas.
Durante la actividad, con una duración general de unas cuatro horas, se practica tanto en las pistas de algunos de los circuitos emblemáticos de España, en pistas diseñadas para la práctica del todoterreno, maniobras para conocer las posibilidades de los asistentes a la conducción…
En definitiva, todo lo necesario para que los participantes en la Volkswagen Driving Experience obtengan el máximo aprovechamiento de la formación, asimilen las rutinas para ser mejores conductores y las pongan en uso en caso de necesidad ya en la carretera.
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Una vida sobre ruedas. De piloto (malo) de motocross a periodista deportivo en Diario AS, incluyendo una década en los grandes premios de MotoGP. Apasionado de los coches y las motos, en más de 30 años ha tenido el privilegio de probar unos cuantos cientos de unos y de otras. Ahora, subdirector en Prisa Motor.