Jogger Hybrid, otro Dacia con potencial de superventas

Puede que cuando llegara a España, Dacia basara su marca en vender coches asequibles. Hoy, sin perder ese enfoque, ha ido mejorando su fórmula para ofrecer productos que compitan en calidad con cualquier otra marca generalista. El Dacia Jogger Hybrid es el mejor ejemplo de la unión de ambas facetas: un coche familiar versátil, barato y con tecnología híbrida eléctrica.

En septiembre de 2021, la firma presentó el modelo más polivalente de su gama, con una oferta que incluía configuraciones de cinco o siete plazas, así como un motor gasolina de 110 CV y una opción de gas licuado del petróleo (GLP). Esta versión, con 100 CV, tiene etiqueta ECO de la Dirección General de Tráfico.

Ahora, la marca rumana completa su oferta con una mecánica híbrida autorrecargable, la primera opción electrificada de la historia de Dacia, aparte del eléctrico puro Spring. El nuevo Jogger ya está disponible en los concesionarios con un precio de partida de 24.450 euros.

Envoltorio conocido

A simple vista, nada cambia en el modelo, pues el Jogger ya lucía la nueva identidad visual de la marca con detalles como el nuevo logo en forma de X. Solo el emblema ‘Hybrid’ en la parte trasera lo distingue del resto de la gama.

Tampoco es que hicieran falta novedades estéticas, puesto lleva poco más de un año en el mercado. Sigue luciendo una imagen fresca y emplea el truco de adoptar ciertos rasgos propios de los SUV (protecciones inferiores y barras en el techo) para ganar puntos en el plano estético.

El resultado es un modelo que, sin alardes, cumple a nivel visual, sobre todo en ciertos colores como el Terracota Brown de la unidad de prueba.

Con una longitud que supera por poco los 4,5 metros, se encuentra en el centro del segmento C, con la particularidad de que, a pesar de sus dimensiones contenidas, cuenta con un interior realmente amplio. Y no ha visto mermada su capacidad por inclusión de la mecánica electrificada, puesto que la batería ocupa el lugar de la rueda de repuesto (en el caso del TCe 110 CV) o del depósito de GLP (ECO-G 100 CV).

Amplio y espartano

Lo primero que destaca al adentrarse en el Dacia Jogger Hybrid es la amplitud. Sorprende el espacio que ofrece pese a ser un vehículo compacto.

No importa en qué fila se monte el ocupante, hay hueco incluso para los pasajeros más altos en cualquiera de las tres. Esto es lógico en los asientos de piloto y copiloto (que no recogen en exceso el cuerpo), así como esperable en la intermedia, pero muy relevante en las dos plazas traseras. El acceso a ellas, además, es relativamente sencillo.

Una vez sentado en los asientos de la tercera fila, un ocupante de hasta 1,85 metros de altura no tendrá problemas de espacio para la cabeza ni para los hombros. Las piernas, aunque más justas, entran bien.

De esta manera, es posible que viajen seis adultos de manera cómoda. E incluso siete si se ocupa la plaza central, aunque entonces las tres personas que viajen en la bancada intermedia irán algo más estrechas.

Dacia ofrece el modelo también en configuración de cinco plazas, aunque dada la diferencia de precio que supone añadir las dos adicionales (900 euros más), sumando el hecho de que estas últimas pueden desmontarse fácilmente y dejarse en el garaje o en casa cuando no hagan falta, se antoja mejor opción decantarse por las siete. A esto se suma un maletero que va de 160 a 2.085 litros de capacidad.

Interior del Dacia Jogger híbrido

La cruz de la moneda la ofrecen los acabados interiores. Hay que tener en cuenta que se trata de un siete plazas híbrido a un precio muy ajustado, algo que debe notarse por alguna parte.

En este caso, es en los materiales empleados en el habitáculo. El del volante, con una textura que imita la piel, cumple su cometido. También lo hacen los bordados de la franja intermedia del salpicadero y los reposabrazos de las puertas. Sin embargo, el resto de superficies visibles son de plástico duro, por lo que la calidad percibida es justa en ese aspecto.

También cabe señalar que la rumorosidad en el habitáculo es algo alta. Al circular en modo eléctrico, dado el silencio del sistema de propulsión, a velocidad de crucero en autopista se oye el ruido del aire. Además, cuando entra en acción el bloque térmico la sonoridad es notable, aunque se rebaja cuando ambos motores actúan de forma conjunta.

Una mecánica realmente equilibrada

Más allá de una rumorosidad alta, consecuencia de una insonorización del habitáculo mejorable, la mecánica híbrida del Dacia Jogger es francamente notable.

Emplea un sistema heredado de los modelos E-Tech de Renault (visto en el Captur, por ejemplo). Combina un motor gasolina atmosférico 1.6 de cuatro cilindros con dos eléctricos: uno hace de motor de arranque y otro ayuda en la propulsión. La mecánica se combina con una caja de cambios multimodo, siendo la única variante automática de la gama.

El resultado son 140 CV de potencia y 144 Nm de par máximo, suficientes para mover con bastante soltura 1.432 kilos con cinco plazas (140 kilos más con siete).

Jogger: más cómodo que dinámico

Cuando se aprieta el acelerador con decisión, la respuesta es bastante inmediata: el Jogger se mueve con brío a costa de la mencionada rumorosidad. Por su enfoque, es un vehículo más cómodo que dinámico, destacando en carretera abierta.

La suspensión filtra de manera notable las irregularidades del firme, pero tiene el punto de dureza justo como para que en zonas reviradas la carrocería no cabecee en exceso. Así, ofrece una sensación de conducción agradable en vías secundarias.

Eso sí, hay que tener en cuenta dos aspectos. El primero es la dirección, pues, como es esperable de un familiar, no es muy directa y tiene cierta holgura en los primeros centímetros de giro. En curvas cerradas, obliga a trabajar con el volante. El segundo es la frenada, que se siente con mucha mordida en la parte inicial del recorrido del pedal (algo a lo que hay que acostumbrarse), para perderla en parte en el tramo final cuando se pisa a fondo.

Por último, y quizá sea lo más importante, hay que hablar de consumos. La marca homologa una cifra de 4,8 litros cada 100 kilómetros. Durante la prueba, algo menos de 200 kilómetros en entornos bastante variados, registró 4,9 l/100 km, un resultado sobresaliente.

Esto se debe al buen hacer del apartado eléctrico, que permite ir en modo cero emisiones durante grandes tramos de la conducción, sobre todo en ciudad (la marca señala un 80% del tiempo). Además, la caja de cambios automática cuenta con un modo que potencia la frenada regenerativa para que la batería se recargue más rápido.

Conclusión

Por todo lo comentado, el Dacia Jogger Hybrid es una ‘rara avis’ en el mercado. Sencillamente, no hay ningún otro familiar de siete plazas que se encuentre, ni por asomo, por debajo de los 25.000 euros.

Dada la implantación de las nuevas zonas de bajas emisiones (ZBE) en España en 2023, Dacia sabe que necesita atacar el mercado electrificado. Seguramente, el híbrido eléctrico ayude a potenciar unas ventas que ya de por sí funcionan bien. El modelo está a punto de alcanzar los 100.000 pedidos.

La única duda puede residir en si los clientes decidirán dar el salto de casi 6.000 euros que hay entre esta versión y la variante de GLP, cuya tarifa arranca en 18.040 euros.