Un turismo de corte clásico pero con una resolución moderna. El Lexus ES es la última berlina de la marca japonesa y también un nuevo ejemplo de cómo estos familiares tradicionales tratan de luchar contra el auge de los SUV: exalta la imagen, proponiendo un diseño más afilado de lo habitual en estos coches, lleva mecánica híbrida para reducir el consumo y ofrecer una eficiencia cercana a la de los motores diésel y refuerza sus argumentos con un dinamismo superior al de los modelos camperos y un interior amplio, cómodo y silencioso que permite viajar con gran confort.
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El Lexus ES llega a España por primera vez, pero alcanza ahora su séptima generación y el fabricante lleva ya vendidos 2,3 millones en otros países. Mide 4,97 metros de longitud y se empareja con el GS para desdoblar la oferta de turismos grandes de la marca. El GS es algo más pequeño (4,88 metros) pero más caro, potente y sofisticado, y tiene propulsión trasera, mientras que el ES recurre a la tracción delantera y, aunque mantiene una calidad notable, cede un poco de refinamiento para poder contener el precio. Y así, está disponible desde 45.000 euros (53.700 el GS).
El acabado de acceso Eco viene ya bastante completo, con llantas de aleación, tapicería de cuero, techo solar, cámara trasera, bluetooth, puertos USB y ayudas de seguridad como la frenada automática de emergencia y la asistencia al guiado por el carril, que centra el coche. También hay una variante F-Sport que aporta una imagen más deportiva en la carrocería, un volante y asientos específicos en el interior y suspensión electrónica para afinar el comportamiento.
El Lexus ES recoge un sistema HUD o de proyección de datos en el parabrisas mejorado, con mayor superficie y gráficos a color más nítidos, y presenta también una nueva entrega del panel de control Touchpad, que permite mover un ratón por la pantalla central para seleccionar los diferentes menús y funciones, y que resulta ahora más preciso que en otros Lexus.
La mecánica, denominada 300h, combina motores de gasolina y eléctrico, rinde 218 CV y declara un consumo medio oficial de 4,4 litros, aunque Lexus ha adelantado que con el nuevo patrón de cálculo WLTP subirá a 5,3. En uso real, tras las pruebas que mezclaron carretera y autopista, el ordenador marcó un registro muy meritorio de 6,3 litros.
El Lexus ES estrena la última evolución de esta mecánica, y se nota positivamente: el motor presenta una respuesta más viva e inmediata (mejor que la del cupé RC 300h, por ejemplo), el cambio automático patina menos (de los mejores de Lexus, aunque todavía por debajo de las cajas de la competencia) y los 218 CV mueven el coche con bastante soltura (de nuevo, mejor que en el RC).
El maletero, por su parte, es el aspecto menos logrado, porque ofrece 454 litros y, aparte de ser algo pequeño para las dimensiones del vehículo, tampoco puede ampliarse abatiendo los respaldos.
Un salón con ruedas
El nuevo ES roza los cinco metros de largo y tiene una cabina muy amplia: puede acomodar con holgura a adultos altos tanto delante como detrás. Los asientos resultan especialmente confortables y, junto a detalles como la calidad de la tapicería de cuero y la cuidada insonorización, que aísla a los ocupantes del exterior, dan como resultado una atmósfera acogedora y relajante que permite viajar con gran comodidad.
LEXUS RC 2019
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