El hiperdeportivo que ha duplicado su precio en apenas dos años

El Mercedes-AMG One vio la luz de manera definitiva en 2022 y ahora piden por un ejemplar de segunda mano sin usar 5 millones de euros.

Mercedes-AMG One

La gestación del Mercedes-AMG One fue una de las más largas de la época reciente del mundo del motor. El hiperdeportivo, inspirado en la Fórmula 1, estuvo en desarrollo varios años hasta que en 2022 se presentó su versión de producción definitiva. Ni dos años han sido necesario para que duplique su valor.

La marca alemana anunció una producción de solo 275 unidades, algo que sumado al perfil del vehículo hizo que fuera un modelo muy cotizado de cara a su hipotética revalorización futura.

En su momento, dependiendo de las especificaciones elegidas por el cliente, costaba a partir de 2,93 millones de dólares. Ahora, se está vendiendo un ejemplar de segunda mano, pero que supuestamente no ha sido conducido nunca, por 20 millones de dirhams de los Emiratos Árabes Unidos por él, es decir, 5,45 millones de dólares (5 millones de euros), prácticamente el doble de lo que le costó a su dueño.

Para pedir dicha cantidad el principal argumento que se esgrime es que, aunque tenga dos años, no cuenta con ni un solo kilómetro en su haber, así que a efectos prácticos es un coche nuevo.

Está a la venta en F1rst Motors, un concesionario de Dubái, y no es descabellado que alguien lo adquiera, puesto que la burbuja de los precios de los coches de colección sigue subiendo y puede que aún se revalorice incluso más.

La hoja técnica del Mercedes-AMG One

El hiperdeportivo mide 4,76 metros de largo, 2 metros de ancho y 1,26 metros de alto; aunque la altura puede rebajarse todavía más en el modo de conducción pensado especialmente para pista.

Su aspecto clave es su sistema de propulsión, que es híbrido enchufable, pero de una complejidad enorme.

Su corazón es un motor 1.6 V6 biturbo sacado de la Fórmula 1 (de la temporada 2017) y es capaz de entregar 574 CV. A este se suma un bloque eléctrico de 122 CV integrado en el turbocompresor, otro de 163 CV implantado en el motor de combustión y conectado al cigüeñal y otros dos, de 163 CV cada uno, asociados a las ruedas delanteras.

Esto hace que su potencia final sea de 1.063 CV de potencia, lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 2,9 segundos, de 0 a 200 km/h en 7 y de 0 a 300 km/h en 15,6 segundos.

Eso sí, monta una batería muy pequeña, de solo 8,4 kWh, que le otorga una autonomía eléctrica de 18 kilómetros, por lo que en España solo luce la etiqueta ECO de la DGT.

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Mario Herráez

Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.

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