La invención del airbag fue fruto de una situación reincidente durante la Segunda Guerra Mundial: los pilotos de cazas se dieron cuentan de que sus chalecos inflables amortiguaban ciertos impactos, así que de ellos surgió la idea de aplicar bolsas de aire desplegables que minimizasen los daños de los ocupantes del vehículo tras un accidente por golpes contra el salpicadero, pirmero, y las puertas o el techo, después.
El desafío pendiente hasta ahora era encontrar el modo de proteger a los usuarios del vehículo de los impactos que pueden sufrir entre ellos. Es el objetivo del airbag que va a estrenar el nuevo Honda Jazz, una importante aportación del modelo y que forma parte de los 10 airbags totales que incorpora el compacto, y que también han anunciado otras marcas como Toyota, Hyundai o Kia: el airbag central delantero.
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Su misión es evitar que el piloto y el copiloto se golpeen entre sí en caso de accidente, situación que puede ocurrir en diversos situaciones de un siniestro, y sobre todo con la sacudida que causa un impacto lateral fuerte.
Este airbag se esconde en el interior del asiento del conductor y, al desplegarse, forma una curva en el lateral interior que recoge a su ocupante y genera una superficie blanda que se interpone entre el mismo y quien viaja a su lado. A esto se suman otras medidas como los pretensores de los cinturones de seguridad, lo que permite reducir hasta en un 98% las lesiones en la cabeza del copiloto.
La patente del airbag data del año 1952 y, en siete décadas de desarrollo, ha evolucionado de manera considerable, sobre todo en lo que se refiere a diversidad de modelos. Los ingenieros han creado una amplia variedad de versiones destinadas a proteger distintas zonas del cuerpo, y los avances han llegado incluso al exterior del coche.
La empresa tecnológica ZF, por ejemplo, ha diseñado un airbag externo que se despliega sobre la carrocería cuando los sensores detectan un impacto inminente.
Respecto a la nueva generación del Honda Jazz, el compacto japonés ha experimentado grandes cambios. Por una parte, su imagen se ha renovado e incluso cuenta con una variante llamada Crosstar, inspirada por el segmento SUV y que dispone de elementos como las protecciones inferiores de los bajos o los raíles del techo. También aporta una versión híbrida que utiliza dos motores eléctricos.
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