El mercado de aplicaciones móviles para la conducción es muy amplio. Las principales apps que eligen los conductores son para navegar y para detectar radares, una de las funciones donde más opciones puede llegar a haber.
Los navegadores más populares, como Google Maps o Waze, incluyen sus propios datos sobre la ubicación de los radares móviles o fijos, aunque a veces fallan y no llegan a dar aviso de todos los cinemómetros instalados en las carreteras españolas.
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Por esta razón, no es extraño que los conductores apuesten por descargar una ‘app‘ más específica para detectar radares. Sin embargo, estas soluciones no siempre tienen mapas bien diseñados o interfaces intuitivas a la hora de conducir con un GPS.
Detectar radares en segundo plano
La aplicación Radares Fijos y Móviles resuelve este problema. Es una de las apps para detectar radares con más solera en las tiendas de descarga y aunque principalmente sirve para ubicar radares fijos y móviles, también se puede utilizar como GPS, aunque es cierto que su presentación no es la más moderna ni intuitiva.
Así, siendo compatible con aplicaciones de conducción como Android Auto, permite ser utilizada en un segundo plano mientras se conduce con, por ejemplo, Google Maps abierto como navegador principal.
De esta manera, es posible conducir siguiendo las indicaciones del GPS al que se esté más acostumbrado y recibir al mismo tiempo las alertas y avisos de radares de esta otra aplicación, más completa que la de los GPS tradicionales.
Además, Radares Fijos y Móviles no solo incluye información sobre estos cinemómetros de la DGT. Cuenta con datos constantemente actualizados, parte ellos gracias a las aportaciones de los usuarios, y también incluye las posiciones de cámaras de tráfico y semáforos, así como los tramos donde la velocidad está reducida por debajo del límite genérico. Toda esta información recopilada es muy útil para evitar multas de diferente naturaleza, más allá de las de velocidad.
Configuración de los avisos
Este recurso para detectar radares dispone, de todas maneras, de mapas proporcionados por Google, aunque irán apareciendo anuncios publicitarios si no se compra su versión superior por un único pago de 3,99 euros.
Sin embargo, la posibilidad de usarla en segundo plano de manera simultánea con otro GPS es muy práctica para no tener que pagar, por un lado, y para seguir utilizando el navegador al que se esté acostumbrado, por el otro.
El conductor seguirá recibiendo avisos de esta app para detectar radares, aunque tenga abierto Google Maps, y se puede elegir entre que sean sonoros o visuales. Se encuentra esta posibilidad en los ajustes de la propia aplicación para configurarlos a las preferencias personales durante la conducción.
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Graduada en Periodismo por la Universidad de Zaragoza, su primer contacto con el mundo del motor fue en los mundiales de MotoGP y Superbikes. Dio el salto al periodismo de motor hace cinco años y, desde entonces, sigue todo lo que tenga ruedas, especialmente si es made in Italy.