El mundo del automóvil está experimentando cambios que antes podrían haberse considerado inimaginables. En los últimos años, la introducción de vehículos eléctricos e híbridos ha redefinido la experiencia de conducción.
Imaginen la sorpresa de quienes aún no han conducido uno de estos modelos de vanguardia al descubrir que al levantar el pie del acelerador se puede reducir la velocidad del coche tanto como si se apretase el pedal del freno. Esta función, conocida como ‘One Pedal Driving’ (conducción con un solo pedal), no solo mejora la comodidad, sino que también permite la regeneración de energía de las baterías del coche. Este pequeño truco ofrece enormes beneficios, ahorrando energía y costes.
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El poder oculto del pedal del acelerador
En los coches eléctricos, y en cierta medida en los híbridos, la conducción va un paso más allá de los vehículos tradicionales de gasolina o diésel. ¿La diferencia más notable? Está en cómo se usa el pedal del acelerador. Mientras que en los vehículos convencionales este pedal simplemente aumenta la velocidad, en los eléctricos también sirve para frenar y regenerar energía.
El ‘One Pedal Drive’ o también llamado ‘e-Pedal‘ (así lo llama Nissan, por ejemplo) permite que el coche desacelere de forma automática y progresiva al levantar el pie del acelerador.

Pero no se trata de un freno motor cualquiera, como en los vehículos térmicos. Durante la desaceleración, el coche transforma la energía cinética en electricidad, que se almacena en la batería. Este efecto no solo aumenta la autonomía del vehículo, sino que también reduce la tensión en el sistema de frenos tradicional, lo que puede prolongar la vida útil de sus componentes.
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Descubriendo los beneficios de ‘conducir con un solo pedal’
La comodidad de operar con un solo pedal es notable, especialmente en entornos urbanos donde los arranques y las paradas son frecuentes. Con un poco de práctica, los conductores aprenden a reducir la velocidad y detener el coche por completo sin usar el freno. Esto ayuda a aliviar la fatiga al volante y proporciona una conducción más suave.

Otra ventaja importante es el menor desgaste del sistema de frenos, como ya se ha mencionado. Usar el pedal de freno con menos frecuencia prolonga la vida útil de las pastillas y los discos, lo que ahorra dinero en mantenimiento. Además, mejora la seguridad, ya que el sistema responde rápidamente al soltar el acelerador.
Activación y dominio de esta tecnología
Si bien es sumamente práctica, la función ‘One Pedal’ no reemplaza por completo la necesidad del pedal de freno habitual. Situaciones como frenadas de emergencia, descensos pronunciados o maniobras en espacios reducidos siguen requiriendo su uso. No obstante, para los viajes diarios, este sistema es más que suficiente.
Con este sistema, los conductores aprenderán pronto a prever el tráfico, calcular mejor las distancias y aprovechar al máximo las pendientes o las frenadas suaves para obtener mayor autonomía.
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