Aunque la previsión de lluvias es aún provisional, otoño es la estación donde más se da este fenómeno meteorológico en un gran número de provincias españolas. La AEMET (Agencia Estatal de Meteorología) prevé lluvia intensa en buena parte de la Península durante los próximos días.
Por eso, lo mejor es preparar el coche con unos sencillos consejos para evitar problemas futuros en caso de atravesar un aguacero.
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Escobillas
La duración de las escobillas del limpiaparabrisas de un coche es de aproximadamente un año o año y medio. Su correcto funcionamiento al barrer el agua del parabrisas es fundamental para la seguridad ya que si no están en buen estado, la seguridad se puede ver comprometida al no ver bien la carretera.
Además, esta época, justo después del verano, es especialmente crítica para estos elementos de goma. Si han estado expuestos al sol y al salitre de las zonas costeras, pueden llegar agrietados y en malas condiciones.
Neumáticos
El elemento principal que hay que tener en perfecto estado. La profundidad del dibujo de la banda de rodadura no puede ser menor de 1,6 milímetros, pero todo lo que sea por encima de esa medida, será en beneficio de la seguridad y de un mayor agarre.
Y en esta estación en la que el asfalto estará mojado en muchas ocasiones, la pérdida de adherencia puede ser especialmente grave. Si no están en buen estado, la recomendación es cambiar los cuatro a la vez, pero si solo se cambian dos, lo adecuado es ponerlos en el eje que tenga la tracción del vehículo.
Es mucho mejor si se colocan neumáticos de invierno o los denominados ‘all season’ que tienen un rendimiento superior en condiciones de baja adherencia. Además, los últimos también son aptos para usar en otras épocas del año sin que su rendimiento disminuya en exceso respecto a un neumático tradicional.
Aire acondicionado
Se debe comprobar que el aire acondicionado o el climatizador funcione perfectamente, ya que su labor para desempañar los cristales desde el interior puede ser crucial. Y es que este empañamiento se suele producir por la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior del coche.
Prácticamente todos los vehículos cuentan con un botón para activar el ‘antiempañamiento’, pero si no lo tiene basta con poner el aire al máximo (con una temperatura intermedia, por ejemplo 22 o 23 grados) y dirigir los aireadores hacia los cristales.
Luces
Ver y ser visto. Esto cobra especial importancia cuando la lluvia es intensa. Hay que revisar que todas las luces funcionan correctamente, con especial atención a las luces antiniebla.
Porque sí, aunque no haya niebla, si la lluvia es muy intensa es conveniente encender tanto las luces antiniebla delanteras como las traseras para poder ser visto sin problemas por el resto de conductores. Si la lluvia no es tan copiosa, no está de más llevar las luces normales encendidas.
Frenos
Con la lluvia, la distancia de frenado aumenta tanto que a 50 km/h, los metros necesarios para detener el vehículo por completo pueden duplicarse.
Por eso es tan importante comprobar que las pastillas y discos estén en buen estado y que el vehículo frena bien, sin tirones, ruidos o un comportamiento extraño.
Pero en general, y si la lluvia aparece, se debería reducir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad. Esto junto a los consejos anteriores deberían ser suficientes para no tener ningún tipo de problema o imprevisto.
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