No es magia: Waze y Google Maps ya no se perderán en los túneles de la M-30 en Madrid

Cuando un túnel se cruza en la ruta que debe llevar al conductor hasta su destino, comienzan los problemas.  ¿La razón? Las aplicaciones de navegación dejan de estar operativas y la persona que va al volante no recibe más instrucciones. Algo que ya no pasará en la M-30 de Madrid.

A principios del mes de abril, el Ayuntamiento de Madrid, a través de Madrid Calle 30, empezó a instalar un sistema de balizas electrónicas bluetooth que permite la navegación guiada a través de los túneles de la M-30.

De esta manera, se está solventando la limitación de la infraestructura de repetidores GPS. Hasta que llegaron las balizas, únicamente, ofrecía posiciones fijas relacionadas con las antenas exteriores y esto no permite una navegación fluida por los túneles.

El GPS ya no se perderá en la M-30

Madrid ha dotado a la M-30 de balizas electrónicas bluetooth, ubicadas a una distancia, aproximada, de 20-40 metros. La instalación se realiza en los laterales del túnel a la altura de las bandejas de cables mediante un soporte de aluminio.

Los citados dispositivos emiten una señal de radio tipo bluetooth de localización que identificará a cada uno. Durante el proceso de configuración del sistema, se asociará cada baliza a su posición en el túnel: esto permitirá a los navegadores posicionar al vehículo sobre el mapa.

¿Por qué las aplicaciones no han funcionado hasta ahora?

Este sistema garantizará la cobertura tanto a los usuarios de Waze como a los de Google Maps. Es lógico que surja la siguiente pregunta: si en los túneles los teléfonos móviles tienen cobertura, ¿por qué, hasta ahora, estas aplicaciones de navegación no funcionaban en los de la M-30?

Porque nada tiene que ver una cosa con la otra: para lo primero ya existen infraestructuras, mientras que lo segundo depende de los satélites.  El funcionamiento de los GPS se basa en la trilateración. 

O lo que es lo mismo: en la señal que reciben de tres satélites y que sirve para conocer su ubicación y su velocidad, entre otros detalles. El problema es que no es lo suficientemente fuerte como para atravesar los muros de un túnel, razón por la que estas aplicaciones tampoco están operativas en garajes o espacios cerrados.   

Si el GPS no puede establecer una conexión con los satélites, no podrá mostrar la ruta dentro del túnel: si el conductor tiene descargado el mapa sin conexión, sí verá el camino, aunque no con información en tiempo real.