El dato que pone en duda el avance rápido de los coches eléctricos

Los jóvenes no quieren coches eléctricos. Los resultados de la primera encuesta del año del Observatorio de Conductores, impulsado por el Real Automóvil Club de España (RACE), señalan que los conductores de menos edad no se plantean la compra este año de turismo sin emisiones

Más de uno de cada cinco encuestados por el RACE valora la posibilidad de comprar coche en este año y, entre ellos, la gran mayoría apuesta por las energías tradicionales. En concreto, el 57,1% prefiere motorizaciones diésel o de gasolina. El 25% de los encuestados valora como primera opción los vehículos híbridos, mientras solo el 7,3% piensa en los eléctricos puros como su alternativa preferida.

El informe Intención de compra y nuevas formas de movilidad desgrana también otros detalles de la intención de compra de los automovilistas. Así, el 38% de los automovilistas prefiere “estrenar un coche, pero es prácticamente el mismo porcentaje de aquellos que lo comprarán de segunda mano u ocasión (29%) y aquellos que dudan y estudiarán ambas opciones (33,5%)”.

Los autores del estudio destacan una de las conclusiones más relevantes: “En contra de la opinión popular, los jóvenes son quienes más le dan la espalda a la compra de un vehículo eléctrico”. Esto sucede especialmente en la franja entre 18 y 24 años: de todos aquellos que valoran cambiar de coche este año, un 75% apuesta por métodos tradicionales de combustión, mientras que un 11% se decantaría por un híbrido. Ninguno se plantea compra un eléctrico, según en Observatorio de Conductores.

Por el contrario, los automovilistas de mayor edad (por encima de 50 años) son los que más intención tiene de hacerse con un eléctrico. La explicación probable, según el informe, es que son conductores de mayor poder adquisitivo y pueden afrontar la compra de un eléctrico, cuyas tarifas son siempre más elevadas.

Respecto a la nueva movilidad, el estudio refleja una realidad del mercado bien conocida: más del 95% de los encuestados tiene un vehículo en propiedad. Un 3% posee un coche de empresa, un 1,5% se decanta por el renting y un 0,8% son conductores sin coche propio. Respecto a la antigüedad, “el 36,3% posee un coche con más de diez años, un 28,3% entre 6 y 10 años, un 28,8% entre 1 y 5 años, y sólo un 6,6% se lo compró hace menos de un año”.

Otras conclusiones del estudio

• El 90% encuestados reclama ayudas para la renovación de vehículos que tengan más de diez años de antigüedad, y el 82% se plantearía la posibilidad de comprar un coche seminuevo si este sector también recibiese ayudas.
• El principal uso del vehículo es para desplazarse al trabajo (un 73%), por delante de otras opciones también cotidianas, como el ocio (60%), ir a la compra (53%) o ya, en menor medida, llevar a los niños al colegio (17,4%) o ir a clase (7%).
• Entre los que trabajan, casi el 78% usa el coche como primera opción para ese desplazamiento, algo que contrasta con aquellos que usan los nuevos vehículos de movilidad personal (bicicleta o patinete), cuyo sumatorio apenas supera el 1%.
• Los conductores españoles tienen clara su posición respecto a los vehículos de movilidad personal, como patinetes o bicicletas. El 24,1% se plantearía utilizar estas modalidades en sustitución del coche, y 89,5% opina que deberían tener una regulación para circular, al igual que ocurre con coches, motos, etc.
• Cerca del 83% de los encuestados reclama, además, que los usuarios de estos vehículos deberían emplear casco. Un 80% pide que tengan un seguro de accidentes y casi siete de cada 10 querría que el uso de un chaleco reflectante fuese obligatorio.