Los secretos del ID.4, el primer SUV eléctrico de Volkswagen

Se ha hecho esperar, pero por fin se ha desvelado el nuevo ID.4, el primer SUV eléctrico de Volkswagen, ya sin camuflaje y con su diseño final, el mismo que llegará a los concesionarios. Y el modelo de serie definitivo confirma lo que se esperaba: es un familiar campero con un estilo limpio y elegante, y una línea más estilizada y aerodinámica de lo habitual.

Es el segundo modelo de la nueva familia eléctrica ID de Volkswagen, tras el compacto ID.3, y está construido sobre la misma plataforma modular. Y se produce en la factoría de Zwickau, Alemania, con procesos y técnicas innovadores que permiten obtener un balance neutro en emisiones de CO₂.

El fabricante ha comunicado que en 2029 habrá comercializado hasta 75 vehículos eléctricos diferentes y que espera que las ventas de estos coches alcancen por entonces los 26 millones de unidades en el mundo.

Los primeros modelos estarán disponibles en España en diciembre y serán de las dos ediciones especiales con las que se estrena el coche: ID.4 1st e iD.4 1st Max. Aunque será en enero de 2021 cuando se produzca el despliegue completo de unidades. Ambas ediciones especiales comparten la mecánica, con motor de 204 CV, propulsión trasera y una batería de 77 kWh que permite anunciar una autonomía de hasta 520 kilómetros. En 2021 aparecerán propulsores más potentes y variantes con tracción 4×4.

El precio no se ha concretado todavía, pero en Alemania el ID.4 1st se venderá por 49.950 euros y el Max por 59.950. Y las tarifas en España deberían ser similares. Las dos ediciones especiales vienen muy equipadas, aunque la Max va más allá y recoge elementos como la suspensión electrónica y el techo solar panorámico, y también sistemas llamativos como un HUD con indicaciones de realidad aumentada y faros que se mueven para saludar al conductor cuando se aproxima al vehículo.

Con una longitud de 4,58 metros, el nuevo Volkswagen ID.4 es un poco más largo que un Tiguan (4,51 metros) y ligeramente más ancho (1,85 metros frente a 1,83). Y junto con una altura inferior (1,61 metros, seis centímetros menos) muestra una estampa más dinámica que su equivalente de combustión y también mejor aerodinámica, porque tiene un Cx de 0,28 (el Tiguan está en 0,32 y las berlinas rondan el 0,25 o 0,26).

El interior presenta el mismo estilo minimalista y digital ya visto en el ID.3, y según la marca ofrece gran habitabilidad, con cinco plazas aptas para todas las estaturas y un maletero de 543 litros, aparte de detalles de seguridad y confort a la última como el airbag central delantero y la iluminación del habitáculo ajustable, en colores, zonas e intensidad.

La batería de 77 kWh aporta una autonomía notable teniendo en cuenta el tamaño y supuesto peso (aún no concretado) del coche, porque los 520 kilómetros lo colocan en posiciones de cabeza entre los SUV eléctricos, tanto si son más compactos como más grandes. Y la aerodinámica es una de las claves, un campo en el que se ha trabajado a fondo: aparte de que los bajos van carenados, las manillas de las puertas van enrasadas en la carrocería y no sobresalen, aportando así una pequeña ayuda para que el Volkswagen ID.4 corte el aire con la mayor fluidez posible.

La marca alemana declara que el nuevo ID.4 acelera de 0 a 100 km/h en 8,5 segundos y que tiene una velocidad máxima autolimitada a 160 km/h. El cambio carece de marchas, como sucede en la mayoría de eléctricos, pero incluye una posición B que aumenta la retención al desacelerar y, por tanto, la recuperación de energía. Y para la recarga, admite tanto postes rápidos (soporta hasta 125 kW) como la conexión doméstica (hasta 11 kW).

La batería, por su parte, está cubierta por una garantía de ocho años o 160.000 kilómetros. Todavía no se han concretado los tiempos de carga, pero sí que enchufado a un poste de alta capacidad recupera en 30 minutos energía suficiente para recorrer 320 kilómetros.

Cuando se agoten las 27.000 unidades que se van a fabricar de las dos series especiales, 1st y 1st Max, empezarán a producirse las versiones preconfiguras, siguiendo la misma línea de lanzamiento por etapas estrenada por el compacto ID.3.