Eso es exactamente lo que se ha planteado la gente de OK-ChipTuning. Si “solo” tienes un Porsche 911 GT2 (pobrecito de ti), el preparador alemán ha creado un trabajo que consigue pasar por encima a la versión más radical del modelo, el GT2 RS.
Para ello han ido directamente a por el motor 3.6 turbo, al que le han realizado modificaciones en la centralita, le han instalado nuevos catalizadores, le han añadido un sistema de escape Akrapovic y, por último, le han instalado los intercoolers del propio GT2 RS.
El resultado es una potencia final de 680 CV y un par máximo de 880 Nm, lo que supone un aumento de 150 CV respecto al bloque original, y que es suficiente para superar los 620 CV del GT2 RS.
Pero, ¿sirve todo esto para ‘mojarle la oreja’ a su hermano mayor? Según la información facilitada por el preparador, sí. Hace el 0-200 km/h en 8,4 segundos (por los 9,4 del RS), el 0-300 km/h en 21,3 segundos (por los 26,7 del RS), el 100-200 km/h en 5,1 segundos (el RS tarda 5,9) y el 100-300 km/h en 18 segundos (en vez de los 23 del RS).
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.