Se trata de un coche muy especial. Y también muy caro por su esmerada fabricación artesanal y la adaptación de una moderna mecánica eléctrica en la empresa de restauración británica Lunaz.
David Beckham siempre ha sido un amante de los automóviles y las motos. Sus conocimientos sobre la materia y una comprensible predilección por los coches británicos (of course ) han influido mucho a la hora de elegir un regalo excepcional para conmemorar la boda de su primogénito Brooklin.
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El Jaguar XK producido durante los años 50 es todo un ícono del automóvil. Y no solo entre los mejores deportivos ingleses, porque es una de las piezas más cotizadas en el mercado de los clásicos a nivel mundial.
Una circunstancia que añade valor a esta codiciada pieza de colección obsequiada por el mítico delantero a su hijo mayor. El coche fue fabricado en 1954, pero ahora el preparador británico Lunaz ha dedicado lo mejor de su trabajo a recuperar su lustre original y poner al día su mecánica.
Además de restaurarlo por completo y dejarlo como nuevo en sus más mínimos detalles, el también especialista en reconversiones eléctricas ha sustituido el motor original de explosión XK 3.4 de seis cilindros por un moderno propulsor eléctrico sin emisiones.
La mayor fortuna pertenece a la familia de la novia
En las instalaciones de Lunaz en Silverstone (Reino Unido), 120 especialistas han trabajado durante miles de horas para poner al día al veterano roadster británico. Todos sus elementos han sido restaurados con un esmero de orfebre y, además del cambio de motor, los frenos, las suspensiones y la dirección originales han sido mejoradas para ofrecer la seguridad y el dinamismo propios de un coche del siglo XXI.
El exquisito regalo de boda cuida hasta el más pequeño detalle. Pintado de azul claro y con interiores decorados en color crema, una placa de identificación lo personaliza con las iniciales de los novios grabadas junto al año de fabricación y el de su actual restauración.
El precio final del Lunaz XK140 supera los 500.000 euros, una cifra espectacular pero que no desentona en el entorno de los felices recién casados. La boda se celebró en la lujosa propiedad que poseen los padres de la novia en Palm Beach (Florida).
Y es que la fortuna del consuegro de David Beckham supera por mucho a la del futbolista ya que Nelson Peltz es una de las personas más ricas del mundo, con un patrimonio superior a los 16.000 millones de dólares, según datos de la lista Forbes.
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