Coches patrulla, vehículos camuflados, motos, furgonetas… y ahora autobuses: estas son las multas que te pondrán 

La Dirección General de Tráfico (DGT) tiene una amplia flota para sancionar: coches patrulla, motos, furgonetas camufladas, vehículos camuflados, además de drones y helicópteros. Ahora, otra ciudad española incorpora a esta lista los autobuses.

En España, invadir o circular por el carril bus es una infracción grave: está prohibido parar, estacionar o usarlo sin autorización. La sanción por ello dependerá del ayuntamiento de cada ciudad y no implica pérdida de puntos en el carnet.

Para evitar estos comportamientos que ralentizan la circulación de la ciudad, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido equipar cuatro de sus autobuses con cámaras que incluyen inteligencia artificial. Corresponden a dos líneas: la H12, que cruza la ciudad, y la D20, que recorre la Avinguda del Paral·lel y también llega a las inmediaciones del puerto.

Detrás de estas cámaras está la empresa americana Hayden AI. Durante el recorrido, realizan fotografías y registran secuencias en vídeo de manera automática: así obtiene todos los datos necesarios dentro del contexto correcto para determinar si existe (o no) infracción.

Cámaras para detectar infracciones

La inteligencia artificial ayuda a que las cámaras identifiquen, automáticamente, las infracciones en el carril bus. También diferencian aquellas ocupaciones que sí están permitidas: circulación de los taxis o un giro permitido a la derecha.

Las cámaras no registran las matrículas y tampoco a las personas. Tampoco son las encargadas de imponer las sanciones porque, además, se trata de una prueba piloto que tiene una duración de seis meses: se presentó en febrero y los primeros resultados llegaron en verano.

En un mes, identificaron más de 2.500 conductas indebidas. Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) está probando este sistema para valorar una posible implantación en el resto de la flota, así como acciones sancionadoras.

Barcelona y Madrid

En la Ciudad Condal, cuando un coche para o estaciona en un carril bus, la sanción puede oscilar entre los 60 y los 200 euros. En Madrid, por su parte, “si se para o estaciona la sanción está tipificada como grave y conlleva una multa de 200 euros y si se circula indebidamente implica una sanción leve de 90 euros”.

Al hilo de esto, Madrid también decidió recurrir a la tecnología para acabar con esta infracción que se repite con frecuencia en sus calles. El ayuntamiento apostó por un sistema de inteligencia artificial, que se instala en el interior de las lunas delanteras de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT).

De esta manera, recopila toda la información que detecte el vehículo cuando esté en movimiento. Sobre todo, identificará dos acciones ilegales muy comunes: ocupaciones indebidas en las paradas y en el carril bus. No en vano, según los datos de la EMT, en 2024, denunciaron a 17.963 vehículos.