A principios de año vio la luz el nuevo Range Rover y, tan solo unos meses después, le toca el turno al Range Rover Sport. Comparte concepto con su hermano, pero le da un toque más deportivo, algo que queda plasmado en un diseño con personalidad propia. Ya está disponible desde 103.050 euros.
Land Rover ha querido dejar claro su carácter desde el primer vistazo. En el frontal la parrilla es más estrecha y forma unidad con los estilizados grupos ópticos, mientras que el paragolpes específico integra hasta cuatro tomas de aire.
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En la vista lateral, además de las llantas de hasta 23 pulgadas, queda clara su silueta más atlética. Influye una longitud de 4,95 metros, ligeramente inferior a la del Range Rover estándar. Además, detalles como la paleta de colores disponible, más llamativa, y el techo de contraste en tono negro también refuerzan su deportividad. Sus proporciones contribuyen a conseguir un coeficiente aerodinámico de 0,29.
El interior presenta una configuración de cinco plazas (835 litros de maletero) y la impresión general es de más lujo, habitual en todos los modelos de la marca. A la tapicería de cuero y los buenos acabados se suman, por ejemplo, los asientos ajustables en 22 posiciones con función de masaje. También el sistema de cancelación de ruido, el equipo de sonido Meridian con 29 altavoces, el cuadro de instrumentos de 13,7 pulgadas o el sistema multimedia Pivi Pro, que se controla desde la pantalla central de 13,1 pulgadas.
Motores para todos los gustos
La oferta mecánica del nuevo Range Rover Sport es muy variada y está electrificada casi al completo. Todas las versiones emplean una caja de cambios automática ZF de ocho velocidades y tracción integral.
Las dos únicas opciones diésel son microhíbridas. El D250 es la de acceso, con 250 CV, y por encima está el D300 de 300 CV.
El siguiente escalón son las dos versiones híbridas enchufables, que utilizan la misma batería de 38,2 kWh. El P440e entrega 440 CV y 620 Nm de par máximo, acelera de 0 a 100 km/h en 5,5 segundos y tiene una autonomía eléctrica de 114 kilómetros. El P510e llega a 510 CV y 700 Nm, completa el sprint en 5,2 segundos y homologa un alcance en modo sin emisiones de 113 kilómetros. Land Rover, no obstante, apunta que la autonomía real rondará los 88 kilómetros.
La versión más deportiva es la P530, con un bloque 4.4 V8 biturbo de 530 CV y 750 Nm de par máximo. Rebaja la cifra en el 0-100 km/h hasta los 4,3 segundos.
De su correcto dinamismo se encargan elementos como la suspensión neumática adaptativa, la barra estabilizadora activa, el reparto de par o los frenos de alto rendimiento, todos ellos de serie. Sin embargo, puede ser todavía mejor con extras como el eje trasero direccional.
Eso dentro de la carretera, porque fuera también anuncia un comportamiento ejemplar. Su distancia libre al suelo de 28,1 centímetros (algo menos en las versiones PHEV) le otorga unos generosos ángulos todoterreno: 33 grados de ataque, 30 de salida y 26,1 el ventral. Además, su capacidad de vadeo es de 90 centímetros.
Precios del nuevo Range Rover Sport
La lista de precios es la siguiente:
- D250: desde 103.050 euros
- D300: desde 107.250 euros
- P440e: desde 102.700 euros
- P510e: desde 141.650 euros
Por el momento no se ha anunciado la tarifa del P530, que será la variante tope de gama hasta que llegue el deportivo SVR. Además, la marca ha anunciado que también habrá un Range Rover Sport eléctrico.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.