La DGT, partidaria de un seguro obligatorio para patinetes

En el día mundial sin coches y en el cogollo de un Madrid de tráfico imposible, el director de la Dirección General de Tráfico, Pere Navarro, ha sugerido la conveniencia de marcar por ley la obligatoriedad de un seguro para los patinetes. “El asunto está en la agenda, porque el debate existe”, ha sostenido en una mesa redonda sobre micromovilidad y seguridad vial organizado por Línea Directa.

“Los ayuntamientos nos piden entrar en este terreno y lo pide también la Fiscalía. Francia ha establecido la obligatoriedad de un seguro, y a nosotros nos gusta ese modelo”, ha resumido Navarro. En definitiva, literalmente, “la DGT es partidaria de un seguro obligatorio para los patinetes”.

El asunto, no obstante, se ha dejado caer sólo como mera intención, ya que esto obligaría a modificar la ley del seguro, cuya decisión última depende del Ministerio de Economía.

La cuestión ha surgido en un debate genérico sobre la profunda transformación de la movilidad urbana, en el que han participado también el director general de Transporte Terrestre, Jaime Moreno, y el coordinador de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Federico Jiménez de Parga.

Los vehículos de movilidad personal (VMP) preocupan a los expertos en seguridad vial por el aumento del número de accidentes (1.300 siniestros registrados en los últimos tres años, con 16 fallecidos) y por la todavía confusa relación entre sus usuarios, los coches y los peatones. 

El pasado 2 de enero entró en vigor la normativa que establece algunas indicaciones básicas, como la prohibición de circular por aceras, zonas peatonales y túneles urbanos, así como la limitación de la velocidad a un máximo de 25 kilómetros por hora. Y la nueva Ley de Tráfico exigirá el uso del casco. Por lo demás, sus conductores deben asumir el Reglamento General de Circulación, lo que implica someterse a controles de alcoholemia o no utilizar auriculares o el móvil.

Pero la ley no se cumple. “Queremos hacer una campaña potente para recordar a los ciudadanos que está prohibido que las bicis y los patinetes vayan por las aceras. No podemos tener una normativa y que no se aplique”, reseña Navarro.  

El asunto del seguro obligatorio se mueve en un escenario todavía resbaladizo, ya que los VMP no están homologados como vehículos a motor, por lo que la ley no les exige la póliza. “Aunque no es obligatorio, creemos que [contratar un seguro] es una buena práctica”, sostiene Jaime Moreno, que añade: “Las ciudades están cambiando. La clave es cómo gestionamos la movilidad para que sea segura, sostenible y digital”. El futuro de las ciudades, apoya Pere Navarro, se juega en la movilidad: “Si no, se quedarán atrapadas en el ruido y la contaminación. El reto es integrarlo todo”.

Las cifras relacionadas con los VMP crecen en relevancia, ya que en los últimos tres años, según datos aportados por Línea Directa, se han vendido más de 800.000 patinetes eléctricos en toda España. Ciudades como Madrid, Zaragoza, Tarragona, Málaga, Sevilla, Gijón o Alcalá de Henares suman alrededor de 10.000 licencias para uso compartido de este tipo de vehículos. Jiménez de Parga cree que el camino correcto es la regulación del sector y propone como modelo el de París, con tres operadores (en la capital de España hay 14) y un máximo de 15.000 patinetes.