Con el nombre de Fleximan, han aparecido al menos una quincena de radares destrozados en diferentes regiones italianas. Después de cada ataque, una firma o una promesa de que Fleximan atacará de nuevo. ¿Quién es este antihéroe que ya copa los titulares en muchos medios españoles?
Todo apunta a que la figura de Fleximan es, en realidad, un grupo de varias personas. Todas ellas comparten un mismo objetivo: destruir radares de velocidad. Los ‘autovelox’ italianos han ido apareciendo destrozados en diferentes regiones como el Piamonte o el Véneto, lo que hace pensar que es imposible que una única persona esté detrás de estos hechos vandálicos.
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¿De dónde viene el nombre de Fleximan? Este apodo nace del modus operandi de algunos de estos agresores, que están utilizando sierras radiales para cortar los cinemómetros e, incluso, llevárselos. Una de las marcas más conocidas de estos aparatos en Italia es Flex, y de ahí proviene el apelativo Fleximan.
Por el momento, las autoridades ya han detenido a un residente de un pueblo del Piamonte, a quien se le acusa de destruir dos radares en la zona de la carretera SS337, en la provincia de Verbano (Piamonte). El acusado ronda los 50 años y es un trabajador y padre de familia que, por el momento, no ha explicado por qué atacó los radares.
La Policía duda de que este sea el único Fleximan y continúa buscando posibles culpables. Por el momento, este vecino tendrá que enfrentarse a una acusación de vandalismo grave y una multa de, por lo menos, 2.000 euros.
Amado por unos, buscado por otros
Muchos usuarios de las redes sociales han aclamado esta figura, y no solo en Italia. El fenómeno Fleximan contra los radares está siendo aplaudido también en España por quienes consideran que estos dispositivos tienen fines recaudatorios más que de seguridad vial.
Obviamente, también hay grandes detractores de esta figura justiciera. Muchos de ellos han sufrido los estragos de los excesos de velocidad y critican a este vengador del ‘autovelox’, recordando la importancia de respetar los límites de velocidad estipulados en carretera.
Las fuerzas del orden italianas están buscando activamente a Fleximan. El coronel Michele Cucuglielli, comandante provincial de los Carabinieros de Padua, ha hablado con el Corriere della Sera. “Estamos trabajando en todos los frentes, sin descuidar el más mínimo detalle y colaboramos no sólo con compañeros de otras provincias sino también con las comisarías y policías locales de los territorios donde se cometieron los daños a los radares”, explicó el coronel a este medio italiano.
Fleximan llega a España
El fenómeno de Fleximan no ha tardado en protagonizar debates y tertulias en España, donde la sanción por vandalismo contra los radares está en los 3.000 euros. No hay que olvidarse de sumar el elevado gasto que supone sustituir un radar de velocidad, que se paga con dinero de los contribuyentes.
Una de las claves del éxito del fenómeno Fleximan tanto en Italia como en España es el sentimiento de haber conseguido venganza que traslada a la ciudadanía. Así lo explicó la criminóloga Simona Ruffini en el diario ‘La Reppublica’, ante el auge de este fenómeno.
En su opinión, el descontento que suelen sentir los ciudadanos por recibir una multa por exceso de velocidad, sobre todo quienes perciben estas sanciones como meros instrumentos recaudatorios, ayuda a que algunos sientan que Fleximan está haciéndoles justicia.
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