Skoda Elroq: mucha calidad a muy buen precio

Siguen llegando vehículos eléctricos de todas las marcas y segmentos. Ahora es el turno de Skoda, con el Elroq, un SUV compacto que atesora mucha calidad de materiales y de rodadura, como luego se verá.

Pero es que, además, llega con un precio de acceso que puede competir de tú a tú perfectamente con lo más granado del sector y con las últimas llegadas procedentes de Oriente que tienen en el precio su principal argumento.

Nuevo lenguaje de diseño

El nombre Elroq ya hace una declaración de intenciones: ‘EL’ de ‘electric’ o ‘eléctrico’ y ROQ de Karoq, el SUV compacto similar de la marca, de combustión.

Por fuera estrena un diseño (se denomina ‘Modern Solid’) que promete verse en más vehículos de la marca checa a partir de ahora. La característica parrilla de Skoda reduce su tamaño y se estiliza, alojando en sus extremos las luces diurnas LED. Sirve además para esconder en su interior el radar y una cámara para diversas funciones de ayuda al conductor. Las llantas pueden ser de hasta 21 pulgadas, pero las de serie son de 19.

Los faros más sofisticados son de tipo matricial y cuentan con 36 segmentos de control individual por cada uno. Por cierto, muestra un coeficiente aerodinámico Cx muy bueno, de 0,26.

Mide 4,49 metros de largo, 1,88 metros de ancho y 1,62 metros de alto y tiene una distancia entre ejes de 2,76 metros, lo que da lugar a una habitabilidad bastante buena, también en las plazas traseras, además de un maletero con 470 litros. Lástima que Skoda, entre esas soluciones que denomina ‘simply clever’, no haya pensado en un frunk. Y tampoco en poner una banqueta corredera o un respaldo ajustable en inclinación.

Interior limpio y bien acabado

A bordo, el salpicadero se muestra con materiales de buena calidad y ajustes muy notables. Es muy similar al que ya exhibe el Skoda Enyaq, el primer eléctrico de la marca.

Volviendo al Elroq, dispone de una pequeña pantalla digital de cinco pulgadas tras el volante y otra de 13 para el infoentretenimiento. De serie, Android Auto y Apple CarPlay inalámbricos y, entre sus opciones, la del navegador con realidad aumentada.

El espacio detrás es bueno, con suficiente habitabilidad para tres adultos, aunque el ancho no sea exagerado, como sucede en otros SUV compactos.

Mecánicas disponibles

El Skoda Elroq llega en versiones 50 y 85, con potencias de 170 y 286 CV y baterías de 52 y 77 kWh respectivamente. Sus autonomías, de 370 y 560 kilómetros. La potencia de carga del modelo superior en corriente continua es de 175 kW con lo que pasaría del 10 al 80% de carga en unos 28 minutos.

Pero el modelo más interesante y más vendido en España será el Skoda Elroq 60, que dispondrá de 204 CV y tracción trasera. De 0 a 100 km/h pasa en 8,5 segundos (el 50 en nueve y el 85 en 6,6) y gracias a una batería de 63 kWh su autonomía será de 400 kilómetros. Para disfrutar de él habrá que esperar hasta enero del año que viene. Y para comprar el 85x con tracción total habrá que esperar hasta mediados de 2025.

Respecto a sus precios, el Elroq 50 parte de los 34.990 euros, pero con ayudas y descuentos (incluido el Moves III) se queda en unos más que interesantes y competitivos 24.100 euros. La versión 60 parte de algo más de 38.000 euros que se quedará por debajo de los 30.000 y el 85 comienza en 43.480 euros pero con descuentos se podrá adquirir por 32.550 euros.

Respecto a sus acabados, el ‘Base’ y, por 3.000 euros de sobrecoste, el ‘Sportline’, con bastantes más opciones y algunos aditamentos estéticos más deportivos.

En este lanzamiento llegará también una versión denominada ‘First Edition’ limitada a 20 unidades en España y que tendrá un precio de 53.100 euros sin descuentos. Contará con un equipamiento específico como techo bicolor, llantas de 20 pulgadas o paragolpes exclusivos (frontal con una tira de luz led).

En marcha

En las carreteras de Mallorca se han podido probar las versiones 50 y 85 y, claro, la diferencia es abrumadora. Sobre todo porque la aceleración y el dinamismo del 50 se asemeja al de un coche de gasolina de unos 100 CV y las reacciones del 85 se parecen a las de un coche de combustión de 300 CV.

El resto del chasis la verdad es que es una delicia. Su suavidad de rodadura es exquisito y hasta la amortiguación ayuda con un equilibrio prácticamente perfecto a la hora de tratar con dignidad a los ocupantes, pero sin dejar de lado una buena sujeción del conjunto en tramos más revirados.

La dirección también está muy bien calibrada y a excepción de una leve sensación de flotabilidad en fuertes acelerones con el 85, transmite muy bien lo que pasa bajo el eje delantero, con una precisión muy alta en virajes de todo tipo incluso en línea recta.

El consumo de la versión 50, homologado en 15,8 kWh/100 km subió un poco, hasta 16,5 kWh cada 100 kilómetros, una cifra también muy buena con la que la autonomía real se acercó muchísimo a la declarada. Otro punto a favor.

Las versiones 50 y 85 ya están a la venta.